Educación de calidad: Ser o no ser

12 Septiembre 2008
Las desigualdades sociales, tienen que ver directamente con la calidad de los sistemas y micro sistemas educativos. Por: Gonzalo Plaza.
Gonzalo Plaza >
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Como candidato a Concejal por La Serena, me estoy preguntado constantemente acerca de mis proyectos o visiones de ciudad.
Casi como un mantra –oración corta y repetitiva hindú- empiezo y termino con el tema educacional.
Digo, la educación de calidad es como una mujer que, o está embarazada o no lo está, pero no puede estar medio embarazada.
Es decir, o la educación es de calidad o no lo es, pero, las medias tintas en este asunto, no corren.
Pero, ¿Cómo saber si un sistema educativo es de calidad?
A nuestro entender un sistema es de calidad;
Primero : Si lo que se enseña prepara y/o sirve para ganarse la vida. (Esto tiene que ver con las descripciones del perfil del egresado escolar, de los profesionales, de los técnicos que queremos)
Segundo : Si lo que se enseña, encuadra o no con el perfil diseñado. Es decir, si en la carrera de Psicología no se enseña PNL (Programación Neuro Lingüística), o al contrario, se imparte el ramo “Meta lenguaje de los Corintios” o “Hermenéutica sinalagmática bilateral en tiempos de sequía”, definitivamente esa mujer no está embarazada.
Tercero : Si en lugar de pasar materia, el sistema privilegia el aprendizaje por competencias, el aprender a aprender, el desarrollo de las capacidades y potencialidades de los alumnos, el dominio de las TIC´s, de herramientas básicas informáticas como los Blogs, el traspaso de experiencias, más que de información, etc.
Cuarto : Si los profesores saben lo que deben enseñar.
Quinto : Si los profesores saben como enseñar lo que deben enseñar.
Sexto : Si los directivos conocen su pega, y la cumplen.
Séptimo : Si los sostenedores están dispuestos a jugarse por la calidad, aunque al principio no ganen mucho.
... entre otras cuestiones más superestructurales.
Para quienes tenemos amputado el sentido de la deslealtad respecto de principios fundamentales, no existe otro destino que nadar contra la corriente, por fuertes que sean las embestidas.
Por eso, mis dichos a veces parecen un tanto extremos, y ciertamente no producen ese arrullo auditivo que algunos interesados quisieran.
¿Cómo es eso de ser disciplinados?
¿A qué despistado se le ocurriría imponer una disciplina que pudiese ahuyentar a quienes no están aún en situación de madurez mínima para capitalizar una educación de calidad, pero, que pagan?
¿A quién, señor mío?
¿A quién se le ocurriría cuestionar a directivos que destinan su tiempo libre o residual del día a su labor directiva, -cuando que se aparecen por sus oficinas en la universidad-, pero, que son “ingeniosos” y hacen rendir el negocio?
Complicada cuestión esa de vivir metiéndose en la pata de los caballos –bolsillos ávidos- por aquello que se estima sagrado desde lo más profundo del Ser, y por lo que se está dispuesto a muchas privaciones.
Una de esas "cosas" sagradas para mí, es la educación de un pueblo, porque en ello se juega su destino.
Las desigualdades sociales, tienen que ver directamente con la calidad de los sistemas y micro sistemas educativos.
Por eso la opción de mantener viva esa llama que arde luminosa por dentro.
Una luz que también quiere rodear cálida a quienes en su afán de lucro no se dan cuenta lo que se están haciendo a sí mismos.
No se dan cuenta, que los hijos de su prójimo, son también los suyos.
Me pregunto, ¿Cómo vivirá su futuro el chofer del bus en el que murieron las niñitas del Colegio Cumbres?
Y, me pregunto si lo que hacen los sostenedores o directivos irresponsables, es muy distinto a la conducta de ocasionó el accidente referido.
Yo creo que es peor, ya que la condena es a la mediocridad de por vida. Por lo menos las niñitas, vivieron plenas hasta sus partidas, y creo que ahora están al amparo de Dios Padre – Madre.
Entonces, persistir hasta la última exhalación.
Imagino que ya llegarán tiempos en que pueda expresarme con mayor fuerza decisoria.
Tener la posibilidad de decidir cursos de acción, de sacudir parásitos, de empoderar a los “jugados de verdad”, en fin, de ensanchar posibilidades de crecimiento.
Y, si no ocurre, habrá igual valido la pena todo el afán por mantenerse leal con lo que se cree.
Con seguridad que otros más capaces y evolucionados, podrán realizar lo que yo no pude.
Mi camino entonces, seguirá rumbo a trabajar por un país que no tiene porqué conformarse con la mediocridad, y al contrario, necesita seguir optando porfiadamente aunque sea por el más pequeño chispeo de luz esperanzadora.

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hola, em una pregunta

hola, em una pregunta ¿cuantos puntos de la PSU se necesita entrar a robotica? gracia

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Estatuto Docente: Una

Estatuto Docente: Una tragedia peor que el Transantiago

Mario Waissbluth, profesor de la Universidad de Chile y afín a la Concertación, se abocó a revisar un sinnúmero de estudios y cifras, y a conversar con expertos en educación, directores y sostenedores de colegios. La idea era arribar a un balance, sin eufemismos ni clichés, sobre la calidad de los profesores y de la educación en Chile y los factores que influyen en ésta. He aquí las dramáticas conclusiones.

Por Mario Waisbluth

Estimados lectores: les expresaré algunas preocupaciones y proposiciones respecto a la tragedia griega que estamos viviendo en la educación, hipotecando el futuro nacional por décadas. No me referiré a la LGE (imprescindible) ni al musical jarrazo, sino a los temas que verdaderamente me preocupan. En este país no se habla la firme, y si no nos sentamos todos a conversar sin eufemismos disfrazados de ideología, esto no se arregla.

Las tragedias griegas terminan mal. Desde el inicio se sabe que las circunstancias de cada actor llevan inevitablemente al descalabro. Cada uno es producto de su historia, nadie es tan bueno ni malo, sino que juega el juego que le tocó.

Contemos el hipotético caso de un joven que estudió hace 15 años en una escuela municipal de regular calidad, y que obtuvo 500 puntos en la PAA, la antigua PSU.

Para mayor claridad, 500 puntos, la mediana de la muestra, equivalía a responder correctamente entre el 10% y el 15% de las preguntas de la PAA. La mitad de los alumnos contestaba menos que eso. De acuerdo a los datos del Second International Adult Literacy Survey (Sials) -elaborado por la organización de países industrializados OCDE-, nuestro joven de los 500 puntos con dificultad comprende hoy, ya adulto, lo que lee.

El dueño de una escuela particular subvencionada me comentó hace poco que cuando reciben alumnos con sólo dos años de mala enseñanza básica, el retraso formativo comparado con sus compañeros se constata como "casi irrecuperable". Las personas que llegan a la educación media o la universidad sin ciertos aprendizajes en materia de lenguaje y aritmética -que debieron obtenerse a temprana edad- difícilmente podrán recuperarlos, por mucha "remediación" (jerga oficial) o capacitación que se les imparta durante su carrera.

En suma, nuestro joven de 500 puntos difícilmente podría haber encarado una carrera universitaria.

El negocio de los pedagógicos express

Sin embargo, Chile le ofreció a este joven una salida. La legislación de educación superior -estupenda muestra del libre mercado- le permitió ingresar a estudiar Pedagogía a una universidad de dudosa calidad, de esas que otorgan los títulos al vapor y/o por internet.

Según una reciente investigación (ver recuadro en la página 16), a lo largo de sus "estudios" los niveles de conocimiento de nuestro joven mejoraron entre... 2% a 4%. No más. Pasó por la universidad y aprendió nada. Pagó buen dinero o incluso se endeudó para comprar un título. En su lugar, cualquiera hubiera hecho lo mismo.

No exagero. Aunque los puntajes de corte y la demanda por estos estudios han ido en aumento, la carrera de Pedagogía Básica registró en el proceso de admisión 2008 un puntaje PSU del último matriculado, que en una universidad llegó a ser de? 320 puntos. Esto equivale a responder correctamente cuatro de las 80 preguntas. Así es, 4 de 80.

De 18 mil estudiantes que este año egresarán como profesores -con poca esperanza de encontrar trabajo-, cerca de la mitad lo está haciendo vía dudosas regularizaciones de estudios. Las universidades que los imparten, incluidas algunas del Consejo de Rectores, hacen un pingüe negocio que crece vertiginosamente: son 40 universidades e institutos que aumentaron, en los últimos 3 años, su matrícula total formal de 12.500 a 24.600 alumnos de Pedagogía. Está bueno el mercado.

El lastre del Estatuto Docente

Luego, ya egresado y titulado, la suerte le sonrió un rato a nuestro joven: pudo ingresar como profesor con una jornada de 44 horas semanales a una escuela municipal. Habiendo logrado -con todas las asignaciones - una remuneración inicial de 591 mil pesos brutos mensuales, que con los aumentos bianuales automáticos llega inexorablemente a 877 mil pesos, éste ya no tan joven, gracias al Estatuto Docente y con el entusiasta apoyo de su Colegio de Profesores, ha procurado rehuir cualquier tipo de evaluación rigurosa.

Si yo estuviera en su lugar, asegurado un ingreso intocable para mi familia, el que no podría haber logrado de otra forma con ese nivel de preparación, me opondría rotundamente a un cambio en la situación. Además me sentiría bastante tranquilo, sabiendo que si el sostenedor municipal osara pedirme la renuncia por "pésimo desempeño docente", existiría la casi certeza de que la Inspección del Trabajo y/o los tribunales me reintegrarían al cargo, con una indemnización de $15 millones a $25 millones. ¿La causal? "Menoscabo por desvinculación injusta". Para perder el trabajo, este profesor debería tener más de 100 días anuales de licencia médica, cometer abuso sexual o un crimen similar.

Digamos las cosas como son porque es sanador. Visto en retrospectiva, el error más caro para el país en dos décadas no es el Transantiago: es el Estatuto Docente. Como en toda tragedia, nadie es tan maligno. Me lo relató un altísimo integrante del primer gobierno de la Concertación: "Ubiquémonos en esa época? Pinochet comandante en jefe, terror a la fuga de capitales, ejercicios de enlace... había que defender la economía y la democracia a toda costa. Tuvimos que concederles mucho a muchos, como el Estatuto Docente a los profesores y el silencio sobre las privatizaciones a los empresarios".

Uno posiblemente hubiera hecho lo mismo.

Retomemos la historia del joven profesor. No creamos que lo está pasando bien. Sus condiciones laborales son durísimas: agotadoras 32 horas de clases, el ambiente es agresivo, su tasa de depresiones severas a lo largo de la vida es de 32% cuando el promedio de una muestra de referencia es de 23%. Sus episodios de pánico o de ansiedad superan por más del doble a la muestra de referencia. Mayor razón para sentirse menoscabado si alguien propusiera someterlo a una evaluación rigurosa.

Como todos sabemos, pero no decimos, la evaluación docente actual es enteramente dudosa. Después de 4 años de resistencia, todavía no se logra evaluar ni siquiera a la mitad de los profesores. Pero algo se ha avanzado; es un logro, casi como poner un pie en una puerta antes cerrada.

Pero, escarbemos en los datos que yacen tras un velo de eufemismos en el sitio web del Ministerio de Educación: los clasificados como "competentes" o "destacados" suman el 64% de los evaluados. Este 64% tiene derecho a un incentivo monetario, para lo cual debe rendir una prueba rigurosa de conocimientos, asunto no incluido en la evaluación regular. Cerca de la mitad de los que tienen ese derecho, por alguna "extraña" razón, se abstiene de rendir dicha prueba, aunque recientemente se ablandaron los criterios para que más profesores lo hagan.

Revisando los resultados de ese proceso, se concluye que en realidad apenas el 10% del total de los profesores tiene niveles de conocimiento comprobado que los pudieran calificar como realmente "competentes" o "destacados".

La situación de los docentes de colegios particulares subvencionados no es muy diferente. Según todo lo que se observa, descontado el factor socioeconómico de sus alumnos, se constata que la realidad educativa, emocional y salarial de los profesores y los tamaños de aula en ambos sistemas son muy parecidos.

El informe del Sials ya mencionado contiene otro dato aterrador, pero como los chilenos somos expertos en hacernos los lesos, esta verdad políticamente irritante no se comenta: sólo el 8% de los egresados de educación superior entiende completamente lo que lee.

Es fácil sospechar entonces que los profesionales que hoy comprenden perfectamente lo que leen no son los que ingresaron a la educación superior con 400 o incluso 600 puntos. El 8% superior en la PSU equivale a cerca de 650 puntos. Por tanto, es difícil creer que muchos profesores comprendan perfectamente lo que leen; luego, es difícil imaginar que podrán enseñar a sus alumnos a comprender lo que leen o a dividir fracciones. Perdón por la franqueza.

En suma, después de revisar informes, mirar cifras y entrevistar a bastante gente para escribir este artículo, si se toma en consideración el origen escolar de la mayoría de los educadores y la calidad de la educación pedagógica que recibieron, es inevitable concluir que, por lo bajo, un tercio de ellos no tiene la formación esencial, los conocimientos, la pedagogía o la motivación para abordar la titánica tarea que este país enfrenta para resolver el problema de la calidad educacional. Peor aun en los mayoritarios casos de alumnos y apoderados en situación vulnerable, lo que requeriría profesores con aun mayores competencias.

Para muchos profesores motivados, nada de esto es su culpa: es este perverso encadenamiento de circunstancias el que los ha puesto donde estamos. Para otros, son flagrantes sus faltas a la ética al recibir un sueldo por un trabajo que no se hace o se hace pésimo.

No cabe duda de que hay una cuota relevante de buenos y motivados profesores, pero hay que mencionar la desmotivación y desidia de muchos. Si yo llevara 20 años en una escuela municipal, en esas condiciones ambientales, laborales y organizacionales, posiblemente me sentiría igual.

La motivación de los docentes tiene una elevada correlación con el liderazgo de los directores de escuela. Está verificado que el liderazgo directivo es el segundo factor intraescuela, luego de las competencias docentes, que más influye en la calidad de la educación. Obvio.

Otra verdad inconveniente

La otra verdad inconveniente, que los parlamentarios de derecha callan discretamente: ¿alguna vez nos explicarán con la frente en alto por qué se opusieron por más de 15 años a cambiar el estatuto pinochetista de "amarre", que declaró a los directores como vitalicios?

Vitalicios. Está clarito por qué: ellos también tienen su cuota de clientelismo. Así son las tragedias. Y luego tienen cara para criticar la calidad de la educación municipal y reclamar por la inflexibilidad laboral del país.

A pesar de que ya se logró cambiar la dichosa norma vitalicia, los astutos artículos transitorios introducidos por estos parlamentarios todavía permiten la permanencia de un buen porcentaje de apernados que no le rinden cuentas a nadie. Como me contó esta semana un sostenedor municipal del sur: "Tengo un tercio de vitalicios; despedí a uno por petición expresa y reiterada del Centro de Padres. Me tuve que tragar 25 meses de indemnización, más una condena de 30 millones de pesos por menoscabo. No lo vuelvo a intentar. Simplemente no tengo la plata. Además, pese a que la matrícula me disminuye año a año, sigo con el mismo número de profesores".

El arreglito es más sicótico todavía: si uno de los vitalicios pierde su concurso? el municipio debe mantenerlo contratado con el mismo sueldo. Esa sí que es flexibilidad laboral.

Negociemos el rescate

En esta tragedia griega, como en un juego de ajedrez, al gremio de profesores se le concedió, por medio del Estatuto Docente, la captura de la educación municipal y la tiene de rehén. Por ende, tiene de rehén el futuro del país.

No estoy juzgando a nadie. Son las benditas circunstancias políticas, históricas y constitucionales. Las mismas que han permitido agarrarse de la teta a otros grupos de poder gremial, empresarial o universidades truchas. Las mismas que han llevado a un grupo de no más de 200 dirigentes políticos a repartirse los cupos parlamentarios y municipales a su gusto durante casi 20 años gracias al sistema binominal, mecanismo inventado para mantener el statu quo y "proteger la democracia". No hay castigo ni incentivo político alguno por obtener resultados de largo plazo que ayuden a la ciudadanía, educación incluida.

"Captura" es lo que ocurre cuando un grupo de agentes, empresas o personas logran apropiarse de una institución o sistema -por conductos formales o informales- para su propio beneficio. Las capturas se resuelven por rescate armado o por negociación. Siendo impensable la primera opción, ¿por qué no inventamos una negociación en la firme, para salir de este embrollo? Pongamos números gruesos, por ejemplo, a lo que costaría modificar radicalmente el Estatuto Docente.

Supongamos retiros anticipados -dignos y programados- a lo largo de cinco años, por unos 15 meses de salario además de lo que establece el Código del Trabajo, para unos 20.000 docentes que no tengan una buena y rigurosa evaluación, y que hoy mal-educan a unos 800 mil niños. No es tan loco considerando que recientemente nueve mil se acogieron a retiro.

Agreguemos el cese inmediato -con pensión razonable- de todos los vitalicios que siguen desmotivando a sus profesores y que no ganen su concurso. Estaríamos sumando unos mil millones de dólares. Esto es inversión por una vez.

Suponiendo el cierre inmediato de carreras pedagógicas de calidad inaceptable y la imprescindible creación de un examen nacional de habilitación para ejercer la pedagogía en cualquier tipo de escuela, deberemos sumar el costo de devolverles la plata que malgastaron en matrículas a unos 10.000 estudiantes de pedagogía express en estos últimos años: serían unos cien millones de dólares más.

Agreguemos un programa para crear o fortalecer institutos pedagógicos dignos de ese nombre, con postgrados de nivel internacional, etc.: otros cien millones de dólares. Por una vez. Ya vamos en 1.200 millones de dólares.

Finalmente, lo más caro. Inmigración inmediata de dos o tres mil profesores extranjeros bilingües con experiencia en aula. Beca robusta para todo estudiante con PSU arriba de 650 puntos que ingrese a estudiar Pedagogía a una carrera acreditada, con una promesa salarial 40% superior al valor actual, y de 70% para aquellos que obtengan un magíster acreditado en Pedagogía o una materia específica. Lo mismo para egresados de Ingeniería, Derecho o cualquier ciencia, que obtengan un magíster acreditado en Pedagogía. En España, por cierto, esta última es la única manera de ser profesor de secundaria. Agréguele inducción, apoyo y mentores para todos los profesores que inicien sus labores. Súmele 100% de aumento salarial para atraer buenos directores de escuela.

Suponiendo un programa paulatino, que comience hoy, estaremos hablando de un gasto adicional que a la vuelta de una década puede llegar a ser del orden de mil millones a mil doscientos millones de dólares anuales, algo así como el 0,5 % del PGB que Chile debería tener para esa época. Números gruesos, por supuesto. Todos los profesores del sistema municipalizado continuarían, si lo desean, siendo miembros del Colegio de Profesores: eso ni se discute. Pero con un renovado y flexible Estatuto Docente, con incentivos asociados a una evaluación rigurosa y a una salida expedita para los casos de flagrante abandono de deberes. Yo pagaría feliz más impuestos para financiar semejante revolución.

Por cierto, éste no es sólo un llamado a los profesores. Para que haya negociación deben existir dos partes. La otra es el Poder Ejecutivo y todos los partidos del espectro político, abandonando por una vez las rencillas y creando el consenso necesario para avanzar con los maestros y no contra ellos.

Pongamos esa plata arriba de la mesa y todos ganan, incluyendo los profesores, que habrán recuperado su histórico sitial en la sociedad. Se crea una carrera docente de estándar internacional. Se desarrolla un nuevo concepto de evaluación, cuyo foco es el perfeccionamiento de profesores que ingresaron a la carrera cumpliendo estándares mínimos. Se fortalece la educación pública que muchos añoramos. Los que más ganarían son nuestros hijos y nietos. Por eso, si quieren, subamos el monto de los retiros anticipados al doble, pagaderos en cómodas cuotas a 10 años. ¿Hay trato? Me convencí que el resto es música? con minúscula.

Las graves conclusiones de un estudio

El estudio data del 2007 -está disponible en el sitio web del Consejo Superior de Educación- y fue elaborado por la U. de Playa Ancha de Ciencias de la Educación y la U. de Valparaíso. Se denomina "Desarrollo de habilidades básicas en lenguaje y matemáticas en egresados de Pedagogía. Un estudio comparativo".

Se le siguió la pista a una muestra de 488 estudiantes de Pedagogía de 5 universidades nacionales. A ellos se les sometió a una prueba de capacidades al ingreso de la carrera (en el 2002) y luego a la misma prueba cuando egresaron, 4 ó 5 años más tarde.

Puesto crudamente, sólo el 64% de los que ingresaron a Pedagogía podía leer un gráfico: esto mejoró a 65,4% después de obtener un título de profesor. O sea, 1,4%. En el caso de extraer conclusiones de un texto, la educación universitaria disminuyó la frecuencia desde 61,6% a 57,8%, un extraño fenómeno de des-educación.

La conclusión textual del trabajo: "A modo de síntesis, la situación descrita indicaría que los estudiantes de Pedagogía ingresan a la universidad con ciertas carencias, reflejadas en sus puntajes de selección, y egresan, después de varios años de estudio, con las mismas limitaciones."

La pregunta más inquietante: ¿por qué este estudio no ha generado un escándalo nacional?

Imagen de Gonzalo Plaza.

Gracias Pitágoras por el

Gracias Pitágoras por el ánimo.

La política a veces no ubica a personas preparadas en cargos delicados.

Es más, si te recuerdas, hasta hace poco, algunos

"iluminatis" defendían la posibilidad de rebajar las condiciones de escolaridad de los candidatos a Alcalde.

Esa es la razón de la sin razón.

Aún vivimos en un país que no privilegia el sentido común.

La imperiosa necesidad de hacer lo obvio.

Imagen de Pitágoras

Excelente artículo,

Excelente artículo, excelentes comentaristas.

Con este nivel de personas que tenemos, que saben tanto de educación, ¿cómo es que estamos tan mal en esta área?

Puchas, así me gustaría que se conversara sobre educación, y que se hicieran bien las cosas .....

Suerte señor candidato. Se ve que es una persona que sabe, que tiene propuestas serias para La Serena.

Imagen de Gonzalo Plaza.

Totalmente de acuerdo con

Totalmente de acuerdo con Claudia.

Hemos hecho sin percatarnos, un gran hiper -transantiago de la educación.

De manera lenta, pero, devastadora.

Con las políticas educacionales más ineficientes a la mano.

La sencillez, nos habría indicado el camino más corto y útil.

Tuve la suerte de haber cursado mi educación básica y media en un establecimiento de curas alemanes. -Colegio Verbo Divino-

Eran simplemente eficientes.

Se hacía lo que tenía que hacerse para aprender.

Lo directo al hueso.

La disciplina era un valor respetado desde potrillo.

Tb. el sentido de la responsabilidad, del compromiso personal.

Es cierto que teníamos buenas instalaciones, pero, el recurso claramente más relevante fue un sistema bien diseñado y bien aplicado.

Hacer lo que se necesitaba hacer.

Con eso nos bastaba para estar permanentemente entre los 5 mejores Colegios de Chile en PAA, y el eterno Campeón de Atletismo Escolar. ....que de alguna manera reflejaba los valores del Colegio. (De ahí salió Sebastián Keitel ...... y coincidencialmente, Sebastián Piñera, quién puede dar un tremendo vuelco positivo al actual estado de nuestra educación)

Se nos infundió el sentido de hacer las cosas bien, porque así deben hacerse.

Simplemente, no había mucho espacio para la tontera.

Es cierto que las realidades sociales, económicas y culturales pueden marcar grandes diferencias entre establecimientos escolares, pero, creo firmemente que habiendo un capital humano eficiente y comprometido, el éxito no debiera tardar.

Y, eso es lo que nos falta en Chile.

Personas serias a cargo de la educación.

Cambiar a las autoridades del sector.

A todas.

Sacar del baile a los chantas que manejan el Colegio de Profesores.

Dignificar al profesorado, elevando a máxima las exigencias para integrarlo, ubicando sus ingresos entre los mejores.

Contratar a lo mejor del mundo a cargo de un nuevo diseño educacional para nuestro querido país.

Continuar con la políticas de perfeccionamientos en el extranjero.

Apoyar, pero, decididamente la investigación científica, la tecnología y la innovación.

Recursos tenemos.

Lo que nos falta es el cambio de gobierno.

Imagen de Claudia Profesora

El alumno que egresa de la

El alumno que egresa de la enseñanza básica debería, a lo menos:

1.- Leer de corrido, entendiendo lo que lee.

2.- Redactar una idea, expresando exactamente lo que piensa.

3.- Hablar correctamente nuestro idioma.

4.- Escribir sin faltas de ortografía.

5.- Saber sumar, restar, dividir y multiplicar. A lo menos, estas 4 operaciones debe dominarlas absolutamente.

6.- Utilizar la regla de 3 de manera rápida, correcta y, comprender su uso.

7.- Saber escuchar a las demás personas.

8.- Discriminar cuándo cuenta con argumentos válidos para defender una idea y, cuándo debería quedarse callado.

7.- Tener desarrollada la capacidad de trabajar en equipo.

8.- Manejarse a nivel de usuario con herramientas básicas de informática.

9.- Conocimientos básicos de Historia, Geografía, Biología y Química.

10.- En el ser, la honradez, la responsabilidad, el espíritu de autocrítica, el respeto por los demás, me parecen valores insoslayables para un ciudadano.

A lo anterior, cada colegio le puede agregar su sello: segundo y/o tercer idioma, música, deporte, religión, etc.

Con estas competencias, tendríamos jóvenes aptos para ingresar en buenas condiciones a la Enseñanza Media.

No se necesitan tantos recursos para lograr estos resultados...

Saludos

Claudia

Imagen de Eloy García Calleja

El problema de la educación

El problema de la educación creo que va más allá de lo que se ve y es más profundo de lo que parece.

La educación parte desde la enseñanza primaria.

El joven chileno se está educando en internet y en la televisión. Son los únicos alcances que tiene a su mano para interactuar.

Chile es el único país, que yo conozco, donde no existen libros de texto recomendados en las universidades, ni donde la mayoría de los alumnos toman notas en las clases.

El problema de la educación universitaria pasa porque la mayoría de los estudiantes no entienden lo que leen, puesto que no están acostumbrados a hacerlo y en consecuencia tampoco saben escribir, por lo que no toman notas.

Lo más gracioso es que una de las preocupaciones de los profesores es la ortografía de sus alumnos, como si el penalizarlos en la universidad les va a enseñar a escribir mejor.

¿No es a estas alturas un poco tarde?

¿No sería un poco mejor que se quite el IVA a los libros, para hacerlos más asequibles a todos y así incentivar el amor por la lectura?

Imagen de José Jirafales

Javier No se trata que

Javier

No se trata que Finlandia nos deje o no nos deje.

Se trata que nosotros queramos.

Peor, querer de verdad, no al estilo concertación.

Imagen de DINO ALKAWIN

Javier, me he reído mucho

Javier, me he reído mucho con tus comentarios, no me preguntes por qué, pero es una manera diferente de expresarlo, sin duda. Para tu información, en Chile ya existen operadores mineros de robots y cada día, en la medida que avanza la tecnología, nos encontramos con que falta mano de obra calificada y tecnologizada, técnicos que podrían ganar más plata que cualquier profesional tradicional. Pero no hay. El tema de los objetivos que menciona Claudia, es muy relevante y es un mal endémico en la educación chilena. ¿Cuántos se preguntaron el campo disponible en criminalística, cuando salió?, ¿a quién le importó cuál iba a ser el final de esos jóvenes?. Pero claro, mientras paguen.... qué importa. Ya es hora de que conversemos en serio el tema y se acote un itinerario hacia objetivos claros, con metas definidas. El clima está ideal, víspera de elecciones, antes del bicentenario, probable cambio de conglomerado gobernante, crisis total del sistema actual.... 35º...a la sombra. Yo no me conformo con eso de que "porque somos así", siempre SIEMPRE se puede cambiar, pero hay que tener la voluntad de hacerlo y ojalá nuestra clase política, que mueve los hilos, tenga la valentía de cambiar un sistema en completo desastre, y que sea bien pensado, no como el que te dije... y aprovechemos la plata del cobre, en algo que realmente traiga réditos a nuestro país. A propósito, la palabra es voilà (allá en francés).

Imagen de Javier Villalobos

Dino, a veces es bueno ser

Dino, a veces es bueno ser rebuscado, ¿has oído ese dicho sobre la aguja en un pajar?. La educación es un pajar inmenso (en muchos sentidos de la palabra).

Tal vez, eso de "ser capaz de desarrollar una labor que a la persona le permita, a lo menos, vivir dignamente", es una buena idea y suena bonito, pero es altamente probable que sea impracticable, ¿por qué?, porque los recursos son escasos y controlados por las empresas. Si la calidad en educación aumenta, aumenta el precio del empleado, eso disminuye las ganancias de la empresa, luego, la empresa se va a otro país donde no hayan políticas educativas de calidad, así la mano de obra es más barata, luego, los educados se quedan decepcionados y crean empresas nuevas, donde tienen que pagar altos costos por la mano de obra, no están dispuestos y comienzan a contratar alumnos en práctica o de establecimientos más "técnicos". Las familias prefieren mandarlos a los técnicos y así, los colegios de calidad se quedan sin alumnos (salvo que hagan una propaganda espectacular), la educación de calidad pierde rentabilidad, el negocio se muere y "waláa", volvemos a ser los de antes. ¿Por qué?, porque se insistió en que una educación de calidad es para que una persona labore mejor por algo más de plata. Yo soy partidario de que la educación de calidad no es para mejorar la mano de obra, somos un país tercermundista, no porque somos "tontos", sino que porque otros necesitan que califiquemos así. A las empresa extranjeras no les interesa que aprendamos a manufacturar, para eso tienen robots, necesitan que demos la vida para extraer los recursos propios, un robot en faenas mineras, forestales o pesqueras, pierde vida útil muy rápido, sale costoso. En cambio, en Chile, el costo humano se los lleva el Estado, la Teletón, étc. Los países europeos tienen una ventaja, su historia les ha fortalecido y han formado un conglomerado, y hasta donde yo sé, se turnan la "presidencia" del conglomerado. En Sudamérica, no tenemos eso, porque hay un montón de vendidos que vendieron la salud, el empleo, los recursos y ahora quieren vender la educación, los países permanecen divididos y peleándose. Esa es la educación que tenemos ahora, la de dividirnos, competitiva, efectiva, eficiente, y ahora quieren que esta sea, además, de calidad.

Investigaré sobre Finlandia, cuando se trata de "minimizar" el asunto de los suicidios, llevándolos a números estadísticos y comparativos, no es porque el suicidio y las razones de él importen.

Por último destaco: "Finlandia también puede jactarse de ser la sede de la empresa de celulares más grande del mundo"... ¿y cuál será el país baboso que consume esos celulares, friéndose la cabeza de a poquito?. ¿Acaso Finlandia va a dejar que el país que más le compra celulares, tal vez, se eduque para que también haga celulares?.

Imagen de Fabian...

He leído con atención

He leído con atención sobre la calidad de la educación, pues, también trabajo en ello y creo que como todos las personas, el tema de la calidad, tiene directa relación con el modelo actual. Ese es mi parecer, mientras no haya cambios sustantivos en el modelo sociopolitico-económico, no habrá mejora en la calidad, más que superar puntajes en pruebas que realmente no miden la miden. Aquí les envio un link, donde aparece un artículo, bastante sugerente, para aquellos que quieran darle una mirada distinta a este gran y grave problema que es la calidad de la educación chilena.

http://www.quepasa.cl/medio/articulo/0,0,38039290_101111578_365938381,00...

Gracias

Imagen de Andy Dufrain

Como ven Don Gonzalo no

Como ven Don Gonzalo no descubrió la polvora.!!

Es archisabido que la educación de calidad y la distribución de la riqueza es sinónimo de desarrollo económico y social.

Ahora, si tenemos colegios, universidades, empresas y gobiernos mediocres no esperemos demasiado....

Imagen de Gonzalo Plaza.

Javier: Entiendo tu punto,

Javier:

Entiendo tu punto, es decir que el Ser Humano lo es por antonomasia y no necesita ganarse el SER.

Pero, mi alcance es más circunscrito.

Claudia:

Guau ...!!!

Simplemente potente.

Dino:

Gracias por tu aporte.

Sabes, aunque sea un poco largo, creo que el artículo que nos sugieres es de tal interés, que me he permitido transcribirlo íntegro.

Nos presenta un caso que los chilenos no tendríamos porqué no igualar e incluso superar.

Es más, nosotros tenemos muchísimos más recursos naturales que Finlandia.

....pero, el pequeño detallito es la EDUCACIÓN ....

Es necesario cambiar a quienes manejan nuestro sistema educativo. (O cambiarles el chip de la responsabilidad y el compromiso)

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AQUÍ VA.

Andrés Oppenheimer

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Finlandia, un ejemplo para Latinoamérica

HELSINKI, Finlandia

Al igual que otros muchos periodistas extranjeros, hice mi peregrinación a Finlandia para averiguar cómo hizo este país para trepar a los primeros puestos de los más importantes rankings internacionales que evalúan el éxito social, económico y político de las naciones. La respuesta, me enteré, es sorprendentemente

simple.

Empecemos por los datos concretos. Finlandia ocupa el primer puesto entre 179 países en el índice anual de Transparencia Internacional sobre las naciones menos corruptas del mundo (EEUU ocupa el puesto número 20); también está en el primer puesto en el ranking de los países más democráticos del mundo de Freedom House (EEUU esta en el puesto número 15); figura en el primer puesto en los exámenes internacionales de ciencia realizados por estudiantes de 15 años (EEUU está en el número 29), y está entre las 10 economías más competitivas del mundo según el Foro Económico Mundial (EEUU encabezó esa lista este año).

Un país pequeño, con tan sólo 5.3 millones de habitantes, que hace apenas dos décadas era el más pobre del norte europeo, Finlandia también puede jactarse de ser la sede de la empresa de celulares más grande del mundo --Nokia-- y de tener las empresas papeleras y de pulpa más innovadoras del planeta.

El éxito finlandés ha provocado curiosidad en todo el mundo, especialmente en Latinoamérica, donde la mayoría de los países aún no han hecho la transición de ser exclusivamente exportadores de materias primas a convertirse en productores de productos de alta tecnología, que se venden por precios mucho más altos en los mercados mundiales.

¿Cómo lo hicieron?, le pregunté a la presidenta de Finlandia, Tarja Halonen, en una extensa entrevista.

''Puedo resumirlo en tres palabras: educación, educación y educación'', repondió. En las últimas décadas, Finlandia invirtió más que casi todos los otros países en la creación de un sistema educativo gratuito. Eso le permitió al país pasar de ser una economía agraria, basada en la industria maderera, a tener una industria de tecnología de avanzada, agregó.

¿Y cuál es el secreto de su sistema educativo?, le pregunté. Entre otras cosas, el excelente nivel de capacitación de los maestros de escuela primaria, dijo ella.

''Tenemos una larga fila de expertos internacionales que están haciendo cola frente a las puertas de nuestro ministerio de educación para ver qué pueden aprender de nuestro sistema'', dijo Halonen. ``Lo que les cuesta creer es que la respuesta sea tan simple como tener buenos maestros''.

Por lo que vi durante mi vista de cinco días a Finlandia, los maestros están relativamente bien pagos y gozan de gran respeto social en este país. Es necesario tener al menos una maestría para enseñar en la escuela primaria, y una licenciatura para enseñar en el kindergarten. Sólo uno de cada diez postulantes es admitido en la carrera universitaria de

Educación.

''La profesión docente se está haciendo cada vez más popular, especialmente entre las mujeres'', me dijo Ossi Airaskorpi, director de la escuela Juvanpuisto, a casi una hora en auto de Helsinki. ``En las décadas de 1980 y de 1990, todo el mundo quería ser ejecutivo. Ahora, todos quieren ser maestros. Así pueden hacer parte de su trabajo en casa, cobrar un salario relativamente bueno, y tener dos meses y medio de vacaciones por año''.

En una visita a un aula de primer grado de la escuela Juvanpuisto, vi a una maestra dictando clase, mientras una asistente estaba sentada en una de las mesas con un grupo de niños, y les susurraba al oído para ayudarlos a entender algo que no habían captado. En una pequeña aula contigua, una ''maestra especial'' le daba una lección personalizada, individual, a una niña que necesitaba apoyo adicional.

Las clases individuales ayudan a reducir la brecha entre los buenos estudiantes y los que no son tan buenos, lo cual ayuda a explicar por qué Finlandia obtiene tan buenos resultados en los exámenes estandarizados internacionales, que miden el conocimiento de todos los estudiantes, y no sólo de los mejores.

Asimismo, las escuelas finlandesas usan un programa de computación al que los padres de los alumnos pueden accesar todas las noches para recibir los últimos reportes sobre sus hijos, como por ejemplo si faltaron a la escuela, usaron su teléfono celular en clase, o deben hacer una tarea especial para el día siguiente.

Mi conclusión: Es cierto, Finlandia también es uno de los primeros puestos en los rankings internacionales de suicidios (aunque Halonen se apresuró en decirme que la tasa de suicidios de su país ha disminuido en los últimos años, y ya no es el campeón del mundo en la materia).

Pero Finlandia podría ser un excelente ejemplo para los países latinoamericanos que quieren convertirse en exportadores de productos de alta tecnología. Les sería muy útil recordar los tres secretos de Finlandia: educación, educación y educación.

Imagen de DINO ALKAWIN

No seas rebuscado Javier,

No seas rebuscado Javier, obviamente que Gonzalo se refiere a ser capaz de desarrollar una labor que a la persona le permita, a lo menos, vivir dignamente.

Interesante artículo, es un tema candente por decir lo menos, difícil, pero todo está en que el estado tome decisiones acertadas, aunque sean radicales. En todo caso, ya es hora de una solución definitiva. Los invito a leer un artículo muy interesante al respecto en http://www.elnuevoherald.com/172/story/277840.html

Imagen de Javier Villalobos

Imagino que la calidad es

Imagino que la calidad es esa sensación que uno tiene de que algo es tan bueno, que satisface lo que uno quiere. Así, varios podríamos ir este 18 de Septiembre a alguna fonda y comernos un asado, pero no necesariamente el asado será de satisfacción para todos. Alguien podría preguntar entonces, ¿crees que la carne era de calidad?. Si me lo preguntan a mi, es altamente probable que diga que sí, porque no "entiendo" de gustos refinados, mientras que tal vez alguien que ha comido en Brasil diga que no. Y ya que, Gonzalo, sentaste las bases de una educación de calidad en siete puntos, te cuestiono en el primer punto (en el que se sustentan los otros seis):

"Si lo que se enseña prepara y/o sirve para ganarse la vida".

Ganarse la vida... o sea, ¿con el hecho de nacer no basta?. ¿Hay que ganarse la vida?. Y para ello, ¿debes por lo menos estudiar 12 años para recién saber si entonces te puedes ganar la vida?. ¿La calidad entonces va relacionada con que una vida esté preparada para ganarse lo que intrínsecamente ya posee?. ¿De eso se trata todo, de competir por tener algo de la vida?. ¿De estar preparados, por sobre otros, para tener derecho a vivir?. ¿Por qué digo "sobre otros"?. Porque de tus palabras, deduzco que quienes no estén preparados o no sirvan, no se pueden ganar la vida.

¿Qué es ganarse la vida para ti Gonzalo?.

Imagen de Claudia Profesora

Una educación de calidad,

Una educación de calidad, tiene que ver con el resultado que esperamos de ella.

Por eso, creo que, en definitiva, nuestro sistema de educación, debe definir muy bien el perfil de ciudadano que quiere.

Definir un perfil significa tener claro los valores (el ser), los conocimientos (el saber) y, las habilidades y destrezas (el hacer) que debe poseer una persona para ingresar all mundo laboral o, para continuar estudios superiores.

Los colegios de calidad, deben disponer de todos los recursos (materiales, humanos, técnicos, metodológicos, etc), para garantizar estos resultados.

Lamentablemente, hoy esto no se logra en nuestra sociedad.

Y, ¿Saben por qué?

La respuesta es muy simple.

Ni las autoridades, ni los directivos de los colegios y, menos los profesores, conocen el perfil de ciudadano que están formando. En realidad, ¿existe ese perfil...?

Entonces, ¿cómo llego si no se dónde voy?

Basta preguntar a un profesor de colegio, cómo su asignatura contribuye a formar al alumno que va a egresar de ese establecimiento. Les aseguro que no conoce la respuesta. No conoce el perfil de egreso del alumno, entonces, no puede saber cómo contribuye a formarlo (si es que alguna vez se lo preguntó).

Los profesores se dedican a "pasar materia", a cumplir con un programa. Generalmente, no están interesados en cuestionarse sobre el efecto de ese aprendizaje en el alumno.

En resumen: si tuviéramos claro el perfil de ciudadano que queremos formar y, si dotamos a los colegios de los recursos necesarios para lograr dicha formación el resultado será, una educación de calidad.

Esa es la discusión que debemos tener. Esa y no distraerse en cuestiones secundarias como el que los sostenedores ganen o no dinero. Esto es, verdaderamennte, irrelevante.

Ojala hayan más candidatos a concejales que se ocupen realmente en mejorar la educación.

Tal como dice el columnista en la educación, está el destino de un pueblo.

Saludos

Claudia