Volverán a repicar las campanas de Andacollo

21 Agosto 2009
“En cada una de las torres se han colocado campanas de admirable sonoridad, pero que producen efectos contrarios. Unas son claras y festivas: producen entusiasmo en el alma. Las campanas de la otra torre son lúgubres"
Eduardo Duarte Yañez >
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El primero de agosto de este año -2009- debió comenzar a ejecutarse el proyecto de Restauración Estructural Iglesia Parroquial de Andacollo, que en esta etapa de diseño realizará la evaluación -coste y metodología a utilizar- de la reparación del llamado Templo Antiguo de la comuna minera. El diagnostico contempla la contratación de los servicios de arquitectura e ingeniería, además de los estudios previos –topografía, mecánica de suelos, etc., por un monto final de 17 millones 358 mil pesos.
Desde la construcción de la primera choza que albergó a la primera imagen de la Virgen de Andacollo -bajo custodia indígena-, hasta la construcción del primer templo antiguo en adobe y madera, el cobijo económico de los trabajos y gastos correspondió siempre a la población andacollina. Templo que a mediados del siglo XVII se encontraba en paupérrimas condiciones “por su vejez y mala construcción” (JRR). Es así como el 25 de diciembre de 1853 los cofrades acordaron emprender una restauración general del Templo. Es estos nuevos trabajos se modifico completamente la estructura original hasta convertirse en el Templo Antiguo que hoy conocemos. Aquellos trabajos contemplaron principalmente el cambio completo del techo, una nueva sacristía y sin duda alguna la seña de identidad que hoy lo identifica, el levantamiento de sus dos torres con sus respectivas campanas. El coste total alcanzo los 17,000 pesos de la época.
De acuerdo a lo anterior podemos imaginar ver a través de los ojos de Ignacio Domeyko, cuando en 1843 –diez años antes de esta restauración- escribió su estudio “Fiesta de Andacollo”, su visión en aquella fiesta grande -26 diciembre- fue la de un templo venido a menos, estructuralmente muy dañado.
Recordemos que la Basílica Menor no existía, no comenzará su construcción hasta 1873. Es así como ya edificadas sus dos flamantes nuevas torres, el repicar de sus campañas inundaba con sus sonidos disímiles el trajeteo cotidiano de todos los habitantes del lugar. Cuestión que pasó a convertirse en una de sus tradiciones más importantes, el tallar de las campanas agudas llamando a misa, a las principales festividades, en las emergencias; mientras que las campanadas de la otra torre de sonidos más graves se utilizaban para las exequias fúnebres o recordando a la memoria colectiva –con respeto- hechos de pesadumbre general en el pueblo.
Es por todo lo anterior que imaginamos un nueva restauración del histórico Templo Antiguo de Andacollo, que contemple la restauración no tan solo estética de sus dos torres, sino que anhelamos sea considerado en estos nuevos estudios arquitectónicos y de ingeniería, el funcionamiento total de las dos campanas de Andacollo, recobrando una de las tradiciones más arraigadas en nuestros antepasados inmediatos.
El corazón se inquieta al creer oír desde lejos el retorno del repiquetear de las campanas de Andacollo, con la voz y vivencias comunes de los que ya no están.