Universidad en Canadá es Atacada por Agresor Solitario

14 Septiembre 2006
Al menos dos personas murieron y 20 resultaron heridas cuando un hombre armado y vestido con una chaqueta negra ingresó a la cafetería de una universidad en Canadá
Gloria Delucchi >
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Una verdadera pesadilla vivieron maestros y estudiantes de la universidad Dawson College, en Montreal, Canadá, luego de ser atacados por un hombre armado que disparó contra varios jóvenes que se encontraban en la cafetería del lugar y donde una mujer perdió la vida y 20 personas más resultaron heridas por el atacante, quien posteriormente fue abatido a balazos por la policía.
La alarma se declaró en la universidad a las 12.41 horas locales, cuando el atacante, identificado como Marc Lepine, de 25 años, que vestía una chaqueta militar negra, entró a la universidad y se encaminó hacia la cafetería, donde sin mediar palabra, sacó entre sus ropas un rifle y comenzó a disparar contra los que se cruzaban en su camino.
Tres minutos después de la agresión, llegaron al lugar varios miembros de la policía que de inmediato procedieron a buscar al agresor, aunque al comienzo hubo confusión, ya que presa de los nervios, los estudiantes dijeron que habían varios hombres armados, y en realidad se trataba de un agresor solitario.
Mientras los policías ingresaban a la universidad en busca del atacante, los maestros y alumnos corrían por los pasillos para encontrar la salida. Fue al entrar a la universidad que los policías encontraron el cadáver de una mujer que presentaba un impacto de bala y una veintena de estudiantes heridos en el interior.
El estudiante Devansh Smri Vastava dijo que vio a un hombre vestido en ropas militares con un gran rifle salir intempestivamente de la cafetería de la escuela y que “simplemente empezó a disparar a todo el mundo”, agregando que escuchó cerca de 20 balazos. También dijo que vio a los maestros correr por los pasillos diciendo a los alumnos que salieran.
Otros testigos hablaron de un pistolero usando una chamarra negra. “Todos corrimos escaleras arriba. Había policías disparando. Fue una locura”, dijo Vastava. “Tenía pavor. El tipo disparaba al azar. No le importaba disparar a todos. Apenas logré salir”.
Robert Soroka, profesor del Dawson College, dijo que escuchó los disparos desde su oficina en el cuarto piso. “Esta pudo haber sido una situación muy mala, si hubiera ocurrido cinco minutos después, cuando los estudiantes hubieran estado saliendo de sus aulas durante el cambio”.
Daniel Harrosch, de 17 años, relató “Estábamos en clase y escuchamos disparos y chicas que gritaban. Abrí la puerta y vi gente corriendo. El profesor cerró la puerta y dijo que pasaba algo grave. En determinado momento, las luces se apagaron y escuchamos varios disparos, una docena tal vez”.
Por su parte, Michel Boyer describió al agresor. “Yo lo vi, estaba vestido de negro y disparaba contra la gente. Nunca había tenido tanto miedo en mi vida”, declaró.
La confusión reinaba en la ciudad, que quedó paralizada con el cierre del metro, una de cuyas estaciones llega hasta la universidad.

El alcalde de Montreal, Gérald Tremblay, declaró que se trató de un hecho desgraciado, pero descartó que fuera un acto de terrorismo. Algunos medios recordaron que este lamentable episodio se produjo tres días después del aniversario del 11-S en EE.UU..
Motivos.
Aunque inicialmente la policía insinuó que el atacante se había suicidado, el director de policía de Montreal, Yvan DeLorme, dijo que “sobre la base de la información actual, el sospechoso fue muerto por la policía” cuando salió del campus y cuyo cuerpo quedó tendido a un costado de una patrulla y frente al centro universitario.
De acuerdo con datos de las autoridades, el atacante, que presuntamente responde al nombre de Marc Lepine, dejó escrita una carta de tres páginas, hallada por la policía y en la que aseguró que las feministas arruinaron su vida y nombró a 19 mujeres famosas de Québec a las que quería matar.
Tras esta carta póstuma, la policía quedó con varias dudas, ya que no encuentran relación con el ataque que perpetró contra estudiantes de este centro educativo, por lo que iniciaron investigaciones para determinar si entre las jóvenes lesionadas y la que perdió la vida había alguna relación de amistad o sentimental.
En Canadá ha habido otras masacres que nadie puede olvidar.
El 6 de diciembre de 1989, un hombre armado irrumpió en la escuela politécnica de Montreal y tras matar a 13 mujeres, se suicidó. El agresor era un desempleado de 25 años “que odiaba a las feministas”, según la Policía.
En 1992, un profesor descontento de la Universidad Concordia, también en Montreal, mató a cuatro de sus colegas.