Las Personas realmente Conocen... Lo que Creen Seguro

26 Septiembre 2006
Hay cosas que realmente nos parece conocerlas al 100%, pero ¿qué tanto podemos asegurar que estamos en lo cierto?
Gabriela Gómez >
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La mayor parte de los jóvenes en la etapa de la adolescencia, piensan sólo en pasarla bien y no se preocupan mayormente de las cosas concretas.
Pensamos que todo lo que nos rodea es verdadero, ¿pero cómo saber si estamos realmente en lo cierto?... nos dicen los mayores que hay algunas cosas que no nos convienen, pero… ¿Realmente les hacemos caso?.. Definitivamente no!. Quizás habremos escuchado algo de lo que nos dijeron, ¿Pero se nos habrá quedado grabado el 100% de toda la conversación?; “quizás algo”, pero debo reconocer que eso va en uno mismo, depende de la persona. Cada individuo es distinto a otro, cada persona es un ser incomparable a otra persona, aún con sus defectos y virtudes.
Muchos dicen conocer la vida… ¿Pero qué tanto conocen de ella para dar esta respuesta o llegar simplemente a esta conclusión ?...y luego de eso si se equivocan… ¿Por qué echarle la culpa a otras cosas que no la tienen y muchas veces ni siquiera la relación adecuada?, hay veces que para mentir nosotros mismos nos transformamos en una mentira viviente, y sin darnos cuenta de lo que hemos hecho, dejamos en el camino muchas cosas inconclusas que solo dañaran a futuro la vida de las otras personas, sin darnos cuenta que las hemos dañado profundamente… de ahí surge en algunas personas el cargo de conciencia ¿Pero por qué algunas personas no sentirán nada cuando le hacen un daño a alguna persona… no sentirán cargo de conciencia… será que sólo algunas personas lo tienen? nos resulta difícil, pedir perdón… pero por qué … será simplemente por el orgullo o por cobardía. Quizás para mantener el ego en alto...¿Quién sabe la respuesta? sólo la sabemos nosotros mismos, sólo hay que darse el tiempo de escuchar al otro, sus explicaciones o tal vez las razones ¿Por qué nos resulta tan difícil hacerlo, siendo que hay otras cosas aún peores que las llevamos a cabo con una simplisidad tremenda, sin obstáculos?
Algunas personas les resulta difícil entender la vida y definitivamente inconcebible sin alguien o bienes materiales, siendo que hay algunas personas que no tienen nada. Entonces porque la hacemos tan difícil, será que nos gusta transformar las cosas complicadas en cosas fáciles, y las cosas fáciles las transformamos en complicadas.
Hay ocasiones que creemos que simplemente lo tenemos todo, pero de un día para otro lo hemos perdido todo, eso lo que hemos pensado toda la vida que es propiedad de nosotros… pero nadie es propiedad de nadie, nosotros somos esclavos y reyes de nosotros mismos.
y tenemos que tener en cuenta que no todo perdura para siempre, que lo que creemos que es concreto hoy en día, quizás ya mañana no lo será, por lo mismo hay que valorar a las personas y las cosas cuando realmente están a nuestro lado, y no lamentarse cuando ya se han ido, y más aún por las cosas que nunca pudimos lograr. Cada quien tiene metas y logros, y hay que valorar las cosas que hemos hecho.. Y hay que hacerse la pregunta: ¿Todo lo que hemos hecho ha traído beneficios y con ello hemos contribuido en algo?
Existen ciertas inquietudes que todos tenemos, pero muy pocos buscan la forma para saber cual es la respuesta. Siempre está la otra parte que sólo se queda con la duda… porque no busca la manera de encontrar una respuesta.
Hay ciertas cosas que nunca encontraremos y que nos vamos a cansar buscándolas o simplemente nunca podamos concretar, por eso debemos valorar lo qué sí logramos en nuestras vidas.

Comentarios

Imagen de Javier Villalobos

Vaya, y este artículo nunca

Vaya, y este artículo nunca lo vi. Esta bueno, son de esas reflexiones que se dan cuando filosofamos, cuando un amigo está angustiado o cuando nos ocurre algo dificil de afrontar.

Para mi la vida es un juego permanente entre la ambivalencia de las cosas, el bien contra el mal, lo correcto y lo incorrecto, lo moralmente aceptable y lo inaceptable, así pues, a veces perdonamos y otras veces no. Amamos y también dañamos, valoramos las cosas cuando no las tenemos, es natural, cuando están, no están perdidas, no son un problema. Si somos felices, es porque sabemos cuándo somos infelices.