Los bebés medicamentos: ¿una ofensa a la vida?

La Comisión Nacional de Reproducción Humana (España) ha permitido que un centro valenciano seleccione embriones para concebir un niño sano que sirva como donante para tratar de salvar la vida de un hermano enfermo.
La evolución de las tecnologías simplemente no tiene límite. En ocasiones nos sorprenden y nos hacen felices porque en cierta parte nos facilitan la vida y en otras nos impacta y preocupa como en este caso particular.
La nueva práctica clínica, consiste en la selección embrionaria para concebir un hijo que pueda actuar como donante compatible de células de sangre de cordón umbilical, con el fin de salvar la vida de un hermano gravemente enfermo.
Este nuevo procedimiento se encuentra restringido, pues solo puede ser utilizado mientras no exista un remedio alternativo y cuando se trata de una enfermedad grave.
En Chile todavía no comenzamos a debatir respecto al aborto y en otros países se encuentran realizando temas muchos más complejos, como es lo estar utilizando bebes para ser usados como medicamentos. Si bien es primordial salvar la vida de una persona, hay que saber qué metodologías usar y velar por bien del que esta por nacer y que tristemente será concebido con fines médicos y no como una planificación familiar.

En la página personal de la bloguera Natalia López Moratalla, Catedrática de Bioquímica y Biología Molecular, Universidad de Navarra, sostiene que:
“Mientras hacen el análisis genético al “bebe medicamento” , él estará en el laboratorio sin recibir de su madre lo que necesita para arrancar su vida con fuerza; por ello, con mayor probabilidad que los nacidos tras haber sido engendrados en su madre, podrá sufrir raras y graves enfermedades (las que llamamos "ligadas a la impronta parental") que no tienen solución hoy día. Este dato, avalado por un centenar de publicaciones deben conocerlo los padres. Buscando ayudar a uno están consistiendo peligros al nuevo. Y si llega a nacer ¿podrá esperar el hermano enfermo a que crezca un poco antes de empezar a sacarle la médula de sus huesos? Si hay garantía de curación con células de un hermano donante compatible lo lógico es buscar donantes en la familia. Y hay que conocer que no hay garantía absoluta de eficacia, ni siquiera en conseguir tal hermano compatible. Casi no hay experiencia; hay un estudio (publicado el 5 de mayo pasado en JAMA volumen 291, página 2079) y es muy poco alentador.
“…Una vez más, es preciso exigir a la ciencia médica, soluciones para la enfermedad de un hijo, que no traiga a los padres sufrimientos aún mayores. Es un derecho de los enfermos y un deber de la Medicina y de la comunidad científica”.