¿Quién quiere ser profesor?

07 Octubre 2007
Mientras no se produzca un profundo cambio en las asignaturas, los profesores seguirán enfrentando aulas repletas de niños desmotivados que esperan por ansiedad a que termine la clase para salir a jugar.
Javier Martinez >
authenticated user Corresponsal

La última semana de septiembre tuve la suerte de asistir a la magnífica conferencia "El lenguaje de la Innovación" impartida por José Luís Larrea, Presidente de Ibermática, una de las principales empresas españolas de Tecnología y Conocimiento, como le gusta denominarse. Que el principal ejecutivo de una empresa de TICs (que años atrás fue Consejero de Economía y Hacienda del Gobierno Vasco), hable apasionadamente durante 1:30 horas de Innovación y de Conocimiento sin dedicar un solo minuto a la tecnología, el mercado o los beneficios, demuestra que todavía hay esperanza y no todo está perdido. Hay 3 cosas que señaló José Luís muy apropiadas para esta columna:

La primera es que para innovar, hay que ver la vida "con los ojos de un niño".
La segunda es que uno de sus objetivos es que todos los gerentes de su empresa hagan clase en la universidad ya que la mejor manera de aprender es cuando tienes que enseñar a otros.
La tercera es que el juego es una magnífica forma de aprender porque en un corto espacio de tiempo permite condensar muchas de las experiencias (muchas de ellas irracionales) que ocurren en la dinámica habitual de una empresa y extraer valiosísimas conclusiones. De hecho narró con entusiasmo la gran cantidad de enseñanzas que se pueden extraer observando a un equipo de baloncesto. Precisamente, durante muchos años, yo jugué a baloncesto de forma más o menos seria y siempre he reconocido todas las competencias que aprendí sobre la cancha que ni el colegio ni la universidad fueron capaces de enseñarme: Trabajo en equipo, liderazgo (sobre todo si eres entrenador), comunicación, resolución de problemas y conflictos, toma de decisiones, estrategia, perseverancia, motivación, compromiso, manejo de la frustración… ¿Cómo aborda el colegio o la universidad estas competencias? ¿Podría un profesor enseñármelas?

Todo esto me lleva a reflexionar sobre qué ocurre para que los adultos deseen volver a mirar la vida como los niños o para que quieran jugar en lugar de tomarse la vida tan en serio. ¿Qué pasa con la Educación? ¿Qué podemos aprender de los niños? ¿Qué sucede en el colegio para que el niño pierda cosas tan valiosas? Y en concreto ¿Qué influencia tienen los profesores en este proceso? La vida no es sueño, como decía Calderón de la Barca, la vida es juego.

Desde que nacemos hasta que entramos al colegio, el juego se convierte en nuestra principal y casi única estrategia de aprendizaje, en la manera a través de la que vamos aprendiendo habilidades y competencias de alta complejidad como andar, hablar o leer. Sin embargo llega el colegio, el mundo cambia, el juego solo aparece fugazmente durante los recreos y los niños miran el reloj impacientes, sin poder aguantar las ganas de que termine la clase para salir a jugar con sus amigos. Y ya como adultos, el juego sigue formando parte importantísima de muchas de las cosas que nos apasionan, entre ellas el deporte.

Esta misma semana, un par de anécdotas me llamaron mucho la atención.

  • Una compañera de trabajo me confesaba esta frase que su hijo, matriculado en un prestigioso colegio privado, le espetó días atrás: "No quiero ir al colegio, no aprendo nada, aprendo más viendo en la televisión el Discovery Channel". Excepto en el colegio, ya no existe ningún ámbito donde los clientes vayan obligados a recibir un servicio que no han solicitado, no quieren y sobre el que apenas pueden opinar.
  • Charlando sobre qué aprendimos en el colegio, un alto directivo me comentaba que durante su etapa escolar, debió cambiar de colegio 5 veces y lo más valioso que rescata de esa época fue que tuvo que aprender constantemente a adaptarse a nuevos entornos, hacer relaciones, socializar y salir adelante cada 2 años.

La mayoría de las personas que conozco que estudiaron para ser profesor, se dedican actualmente a actividades que no tienen nada que ver con hacer clase frente a un grupo de niños. Las razones son múltiples: La vocación de enseñar se va frustrando al enfrentar cada año los mismos rituales: niños desmotivados, asignaturas monótonas y desactualizadas, padres poco comprometidos, administración hostil, escaso reconocimiento social … Por si fuera poco, el sueldo de un profesor roza en muchas ocasiones lo miserable y ya sabemos que no sólo de pan vive el hombre.

He conversado con algunos profesores para conocer de primera fuente cómo ven ellos mismos su profesión, si se sienten valorados y disfrutan haciendo su trabajo. He preguntado a algunos jóvenes cuál es la profesión que pretenden ejercer en el futuro y los resultados son lapidarios; ninguno manifiesta el más mínimo interés por ser profesor.

El Pasado
Tiempo atrás, era común escuchar que las personas más importantes de un pueblo eran: El Alcalde (poder político), el Cura (poder divino), el Policía (poder militar), el Médico (poder del conocimiento "mágico") y el Profesor (poder del conocimiento intelectual). El profesor era una figura respetada ya que poseía algo que casi nadie tenía al acumular un saber enciclopédico: conocimiento. Un profesor era una persona de prestigio y evidentemente, dentro del aula decidía sobre el destino de los alumnos lo que le otorgaba un poder absoluto.

Nadie discutía que existía un cuerpo de conocimientos (currículum) que había que aprender, la función del profesor era enseñarlos y la del alumno era estudiarlos y la forma de verificar si eso estaba ocurriendo eran los exámenes. Todos los niños estudiaban exactamente las mismas asignaturas, al mismo ritmo y la escuela tenía sospechosas similitudes con una fábrica (en este caso de producción de seres humanos, todos iguales). La autoridad era posiblemente la principal característica de esa época. Si en una fábrica, los jefes pensaban y ordenaban qué hacer y los obreros ejecutaban el trabajo, el aula reproducía esa realidad a su imagen y semejanza con el profesor mandando y los alumnos obedeciendo.

Existía un círculo vicioso formado por clases con un mínimo de 30 alumnos que giraban alrededor de un profesor que impartía "clases magistrales" que no eran otra cosa que monólogos donde los niños sólo hablaban cuando se les preguntaba (y trataban de usted al profesor). La educación era una competición donde unos ganaban y otros perdían lo que es un veneno mortal porque obliga a que todo se organice alrededor de las notas. Desde luego, no se premiaba el pensamiento original, la innovación ni se motivaba a conocer más y menos aún a aprender de si mismo.

Que la educación tenía graves problemas fue algo denunciado con vehemencia por personajes poco sospechosos de hablar a la ligera como Platón, Kant, Montaigne, Locke, Dewey, Descartes o Einstein pero quizás esta sea la frase más contundente "Estoy seguro que la razón por la que surgen tantos idiotas de nuestras escuelas es porque no tienen ningún tipo de contacto con nada útil para la vida diaria" atribuida a Petronio en el año …. ¡¡ 66 antes de Cristo !!.

Imaginad que por un momento nos transportásemos en un viaje hacia el pasado y aterrizásemos en la Edad Media. ¿En qué podríamos trabajar? ¿De qué nos servirían los múltiples conocimientos que tenemos hoy? ¿Y si una persona de la Edad Media llegase a nuestro mundo del 2007, qué podría hacer? Para hacer cualquier cosa, necesitamos saber y para saber hay que aprender pero sobre todo, cosas útiles.

Un periódico de negocios publicaba una estadística que indicaba que un Directivo que se cambia de empresa tarda alrededor de 1 año en aportar valor a su nueva empresa. Los que contratamos jóvenes recién salidos de la universidad, sabemos que tendremos que esperar unos 2 años hasta que empiezan a ser productivos ya que desconocen las tareas más elementales del mundo laboral: apenas saben gestionar a un cliente, preparar propuestas comerciales, innovar la oferta de servicios o productos de su empresa, negociar con un proveedor, gestionar un proyecto, liderar un equipo de trabajo, dirigir una reunión, etc. Sabiendo que lo que les espera al terminar la dilatada vida estudiantil es simbólicamente "jugar al fútbol", cuando llegan el primer día a trabajar confiesan que nunca antes habían visto ni jugado con una pelota. La culpa no es suya, el problema es que sus profesores solo les puede enseñar a ser… profesores pero difícilmente a adquirir las habilidades que requieren las empresas por 3 razones:

  1. El currículum no contempla aprender este tipo de "competencias"
  2. Aunque el currículum las incluyese, la mayoría de profesores no las dominan
  3. Aquellos pocos que las dominan, no saben cómo enseñar a otros para que las aprendan

Parece mentira que nadie asuma la responsabilidad de modificar drásticamente el currículum escolar y universitario que representa un mundo que ya dejó de existir. Nadie se atreve a denunciar que el 90% de las Matemáticas o la Historia que se enseña no sirven de nada al 90% de las personas (que además hoy no las pueden recordar) mientras que nadie puede prosperar en la vida sin saber cómo Colaborar y Trabajar con otros o sin saber Vender.

Hoy, entrar en un aula no significa dar un paso hacia el futuro más bien hacia el pasado. Mientras un profesor decida tu futuro, no se verá a sí mismo como proveedor de un servicio. Sin embargo, soy optimista, vienen tiempos mucho mejores, sobre todo para los profesores y para sus alumnos.

Comentarios

Imagen de R.M.V

La verdad los seres más

La verdad los seres más desagradecidos que he encontrado los tengo en este momento. Mis clases son dinámicas, trato de dar lo mejor de mi y la respuesta ha sido negativa a la hora de colaborar y comprometerse, que tristeza. Ojalá pudiera decirles para quien trabajo, pero si les digo son adultos llenos de pereza y pocas aspiraciones.

Imagen de profesor

Hola soy profesor

Hola

soy profesor desilucionado con el sistema, frustrado, estudie 5 años para ganar 400 mil pesos, para pasar rabia,para cuidar a alumnos, para llevar pruebas a la casa, para sentirme lo mas bajo de las profesiones.

espero que nunca estudien pedagogia perdon PEGAJODIA.

Imagen de marta

ser profesora cuesta hay

ser profesora cuesta hay niños desobedientes etc.. pero los niños dan alegria a tu vida

Imagen de Enzo E.A

Yo opino que no me

Yo opino que no me gustaria ser profesor porque

como ahora hay más problema de que pagan poco

exclusivamente alegan los profesores,tambien hay que

soportar a los niños porfiados y ahora es mas dificil

educarlos por la increible sociedad, no digo que es mala

sino al contrario,dejandolos que opinen libremente

se educaran mejor.

Imagen de ignacio flores

Yo por mi parte diria no por

Yo por mi parte diria no por que hay que soportar a los niños malcriados y porfiados como yo. Hay que andar anotandolos y colocar puros rogos, ademas el sueldo no se como sera pero yo quiero ser futbolista.

Imagen de juan martinez

yo creo q si los profesores

yo creo q si los profesores no cobraran tanto este pais podria llegar muchu mas lejos de lo q esta si qremos algo mejor para chile devemos tener mejor educacion para este chile seremos todos profecionales aciq profesores piensen esto vien para poder llegar lejos no importa la plata sino la vuena educasion de todos los niños de nuestro pais se q para vivir ay q tener dinero pero ay q acer esto por nuestros o sus hijos piensenlo vien profesores no sean tan care palo para cobrar tanto

Imagen de isis

yo si quiero ser profesora

yo si quiero ser profesora por que tengo buenas relaciones con los niños pero igual no quiero ser profesora quiero ser parvularia

Imagen de Rodrigo Beltrán Rojas (Flaco)

Bueno lo que leí quede en

Bueno lo que leí quede en verdad impresionado a decir verdad los niños no esatn muy motivados, para ello hay que motivarlos crear clases entretenidas o bien preguntar a un niño que le gustaria hacer en la clase( obvio un tarao diria "jugar" nunca falta el imbecil) y así aplicar lo que quisiera el niño o transformarlo en una actividad

Imagen de Rodrigo Beltrán Rojas (Flaco)

Bueno lo que leí quede en

Bueno lo que leí quede en verdad impresionado a decir verdad los niños no esatn muy motivados, para ello hay que motivarlos crear clases entretenidas o bien preguntar a un niño que le gustaria hacer en la clase( obvio un tarao diria "jugar" nunca falta el imbecil) y así aplicar lo que quisiera el niño o transformarlo en una actividad

Imagen de shyc

A mi me gustaria ser

A mi me gustaria ser parvularia por que ser profesor es muy estresante lo digo porque yo tengo un profesor que con mis compañeros pasan mucha ravia

y lo debemos tener estresado.

Mi profesor se llama Pablo Angel.

Imagen de shyc

A mi me gustaria ser

A mi me gustaria ser parvularia por que ser profesor es muy estresante lo digo porque yo tengo un profesor que con mis compañeros pasan mucha rabia

y lo debemos tener estresado.

Mi profesor se llama Pablo Angel.

Imagen de Rodrigo Beltrán Rojas (Flaco)

Bueno lo que leí quede en

Bueno lo que leí quede en verdad impresionado a decir verdad los niños no esatn muy motivados, para ello hay que motivarlos crear clases entretenidas o bien preguntar a un niño que le gustaría hacer en la clase( obvio un tarao diría "jugar" nunca falta el imbécil) y así aplicar lo que quisiera el niño o transformarlo en una actividad

Imagen de Mr.Jonathan

bueno, yo no creo que algun

bueno, yo no creo que algun día podria ser profesor, pero que seria de este mundo sin profesores. Es algo de lo más importante en este mundo los profesores, son aquellos de los cuales aprendemos,nos enseñan con paciencia espero que no dejen de enseñar.

FIN.

Imagen de Javier Villalobos

En mis experiencias de

En mis experiencias de diálogos, aporto respecto a lo que piensan algunos profesores, y no es que se haga una discriminación hacia ellos, sino más bien, es para resaltar que es una profesión que se elige en un punto determinado de nuestras vidas, haciéndolos responsables de los cambios educativos del resto de la sociedad. Pues, uno de ellos me comentaba que no le interesaba tratar con niños en riesgo social o de conductas complejas, su intención era trabajar en un buen colegio donde le fuera fácil enseñar.

Hace poco, recuerdo que una amiga diseñadora me comentaba que necesitaba un profesor particular para su hijo. Cuando le pregunté cuánto pagaría, me contestó que si cobrara $8000 por hora lo encontraba caro. A lo cual le recordé que ella cobraba 2 UF la hora por sus disños a sitios Web. ¿Es acaso la labor de un profesor más barata que el diseño de una página web?. Si se valorara lo "aportativo" al ser humano, creo que el profesor debería cobrar 2 UF la hora.

Javier Martínez, creo que en algún punto de la historia, mundial o nacional, se englobaron todos los conocimientos con el objetivo de que las personas fueran "educadas" y constituyeran herramientas útiles de productividad, ¿por qué?, porque hasta ahora creo que todo es un coladero. Se filtran individuos al momento en que existen colegios públicos y particulares. Luego, se filtra al momento de entrar a la Universidad, y finalmente se filtra al ingresar al mundo laboral. Y de eso se trata la vida, "educarte" para tener un buen trabajo. Y ni siquiera el "educar" para "educar a otros" es bien pagado (qué injusticia económica).

Tal vez, el objetivo de "educar" a una sociedad debiera ser cambiado. Tal vez tu "innovación" intente decirte que debe apuntar a cambiar el objetivo. Tal vez, estudiar Historia debiera ser como hace el History Channel, en base a anécdotas, entrevista a personajes, teorías, hechos míticos y científicos. Tal vez las matemáticas deban dar espacio a "poetizar" con ellas. Tal vez la distribución de los cursos debería ser por "intereses" similares entre los alumnos y no por conducta, promedio o condición socioeconómica. Tal vez, subestimamos a los niños. Tal vez, alguien entendió que "educando" a un niño, se obtiene a un soldado fiel a la sociedad. En cambio, dejándolo a su "libre" pensamiento puede dar lugar a un revolucionario.