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La Teletón puede ser o no una farándula con más o menos aprovechadores como lo ha sido hasta ahora, pero no percibo consecuencias negativas en sus actos, la esterotipización de la discapacidad no me parece tal, creo que primero ha visibilizado un problema económico que trae consigo la discapacidad, y que ninguna familia puede asumir esos costos. El problema es que no hemos sido capaces, entre medio de todo, de hacer que el Estado se haga cargo de lo que le corresponde. Que haga cumplir las leyes que mejorarían la calidad de vida, que la educación integre. 

Creo que el gran pecado de la Teletón no es juntar plata para caros tratamientos, sino el que todos nos hayamos conformado con donar unos pesos y liberar nuestras conciencias. ¿Por qué no hacemos marchas porque haya más fiscalización del cumplimiento de leyes?  ¿Por que no funamos empresas que van a donar a la teletón y luego no integran? ¿Por que no demandamos al estado que haga lo suyo? ¿Por qué debemos privar a los discapacitados de buena atención médica, integral y de calidad si no hemos sido capaces de generar que  el Estado se haga cargo? 

Somos nosotros los que debemos presionar al estado para que cumpla su función, veamos como hacemos eso mejor, luego veremos si es necesaria la teletón farandulera o tal vez, necesitemos una teletón en las calles exigiendo derechos.