Los padres no deben hacer las tareas de sus hijos

14 Junio 2016

Tampoco es bueno que el apoderado culpe a los profesores de que su hijo no saque buenas notas en el colegio. ¿Por qué?

Equipo El Obser... >
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La campaña "La tarea es sin tareas", liderada por un grupo de padres que está en contra de que los colegios envíen tareas a los niños a sus casas, ya suma más de 75 mil miembros en Facebook. Si bien la discusión sobre su beneficio pedagógico ya está la palestra, lo cierto es que el primer semestre está llegando a su fin y, para subir las calificaciones, muchos padres se vuelcan a estudiar con sus hijos e incluso a hacerles las tareas y trabajos escolares. Sin embargo, esta conducta podría perjudicar la autoestima de los más pequeños del hogar. 

“Los padres deberían tener claro qué es lo que les corresponde hacer a sus hijos y qué deben hacer ellos, lo que se traduce, por ejemplo, en quelos adultos no deben hacerles las tareas a los niños. Dependiendo de la edad, sí es importante que un pequeño tenga cierta ayuda, pero esaayuda debe consistir en que los padres creen ciertas condiciones para que el niño esté lo más tranquilo posible, para que  pueda estudiar sin complicaciones, es decir, que tenga un lugar cómodo, sin ruidos molestos, con buena iluminación y con los materiales disponibles”, explica Carmen Gutiérrez, Directora de la Escuela de Psicología de la Universidad del Pacífico y experta en procesos de enseñanza-aprendizaje. 

En esa misma línea, tampoco es bueno que los padres se trasformen en verdaderos profesores a domicilio, repasando las materias y tomándoles pruebas, ya que podrían estar limitando la autonomía de los niños. 

No es tan bueno que los padres repasen y estudien la materia con sus hijos, ya que la familia y todos los demás agentes de sociabilización, como el colegio y otros parientes, deben procurar el máximo de independencia de los niños y que ellos se sientan capaces de resolver sus propios problemas. Mientras más el padre está encima de su hijo, aclarándole las cosas o haciendo las tareas por él, le está quitando espacio al niño para que despliegue sus propios recursos y capacidades. Hacerle las tareas al niño deja un lenguaje implícito de ‘yo lo hago por ti porque tú no eres capaz’, lo que va en desmedro de la autoestima y la capacidad del niño”, asegura la psicóloga. 

No ir contra el colegio 

Cuando los niños están obteniendo malas calificaciones o están a punto de repetir el curso, muchos padres culpan a los profesores o al colegio de la situación, argumentando que se debe a la falta de una buena enseñanza y disciplina en el establecimiento o a que al docente no le agrada su hijo. 

Es primordial que la familia valore el rol del colegio, de los profesores y la actitud responsable de los niños frente al aprendizaje. Todos los niños tienen en sí mismos la curiosidad por aprender y es fundamental que la familia la encauce a través de la autoestima, motivación de logros y conductas responsables. Cuando un padre pelea con el profesor de su hijo demuestra que no sabe aceptar las características, las fortalezas y limitaciones del pequeño. Hay que preguntarse qué le pasa al papá que no es capaz de reconocer que su hijo tenga dificultades. Los niños pueden tener talentos y errores, lo que no los hace ni malos ni buenos seres humanos. Podría ser que el hijo efectivamente tenga alguna dificultad, de cualquier tipo, no sólo de problema de aprendizaje, sino que puede hasta de una situación emocional que interfiere muy fuerte”, indica explica la Directora de la Escuela de Psicología de la Universidad del Pacífico, Carmen Gutiérrez. 

Generalmente los docentes citan a los padres a una reunión para tratar el tema de las bajas calificaciones o el mal comportamiento del alumno, con el objetivo de ver qué es lo que está pasando. Es ahí donde algunos apoderados culpan a los profesores de las malas notas de sus hijos, lo que es un error garrafal, según la especialista

Ese es un comportamiento de sobreprotección, ya que están dando cuenta de que su hijo no sabe resolver sus propios problemas, lo que a su vez deja a los niños con una sensación de desprotección. Esas reuniones deberían tratar de armar un panorama del niño. Si el padre va a pelear con el colegio, no está aceptando a su hijo tal cual o se está negando a verlo tal como es. Y como no lo ve, no lo puede ayudar”, concluye la psicóloga de la U. del Pacífico.