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En el último tiempo, las dietas vegetarianas y veganas, que se caracterizan por la eliminación de productos cárneos o derivados animales, han tenido un gran aumento dentro de nuestra sociedad. Las razones para llevar este tipo de alimentación puede ser por problemas de salud o por una decisión ética o moral propia, esta es una alimentación restrictiva, y por ende tiende a generar controversia, debido a que los alimentos que se restringen son aquellos que aportan una gran cantidad de proteínas, por lo que se puede pensar que son indispensables, pero ¿Realmente lo son?

Hay distintas alternativas de alimentación vegetariana, entre estas destacan:

• Ovo-lacto vegetarianos: Son aquellos vegetarianos que eliminan de su dieta todo tipo de carnes, pero mantienen el consumo de leche, derivados lácteos y huevos.

• Ovo vegetarianos: Son aquellos vegetarianos que eliminan todo tipo de carnes, leche y derivados lácteos, consumiendo solo huevo.

• Lacto vegetarianos: Son aquellos vegetarianos que eliminan todo tipo de carnes y huevo, sin embargo consumen leche y derivados lácteos.

• Veganos: Es el término utilizado para nombrar a aquellos que eliminan de su dieta todo tipo de carnes, huevos, leche y derivados lácteos. Además, en muchos casos, eliminan totalmente la utilización los productos animales incluyendo el cuero y la lana.

Si bien los productos de origen animal tienen una gran cantidad de proteínas y además son de alta calidad (es decir que nuestro cuerpo lo asimila de mejor manera), no son los únicos alimentos que las presentan. Otros alimentos como las legumbres, soya y derivados, frutos secos, semillas, granos, harinas y productos elaborados con estas, pueden aportar las proteínas necesarias y en la cantidad que nuestro cuerpo necesita, y si se complementan, logran formar una proteína similar a las de las carnes.

Aquellos vegetarianos que incluyen lácteos, derivados o huevos, no tienen problemas con la ingesta de proteínas, ya que estos son altamente aportadores, por lo que el consumo diario sería suficiente para lograr cubrir las necesidades de cada uno.

Para aquellos que no consumen ni huevo, ni leche o derivados, hay que destacar que las bebidas vegetales, conocidas como “leches vegetales” (destacan las populares “leche de almendras” o “leche de avena”), no tienen el mismo aporte de proteínas o calcio que la leche de vaca, por lo que si bien se pueden tomar, no se deben considerar como reemplazo de ésta en cuanto al aporte de nutrientes.

Las legumbres, son una excelente fuente proteica, sin embargo para formar una proteína más completa se deben consumir acompañadas (también llamada “complementadas”) de productos como arroz, fideos, papa o incluso pan, variando la forma de preparación en guisos, hummus, hamburguesas, ensaladas, etc.

Otros productos que se destacan son la quinoa, que es un pseudocereal cada vez más presente en nuestra mesa y que aporta proteínas de alta calidad, como también los cereales integrales y frutos secos, que si bien no tienen una gran cantidad, pueden ser un aporte importante para cubrir las necesidades diarias de proteínas.

Llevar una dieta vegetariana trae consigo beneficios para la salud como la disminución del colesterol, que a su vez ayuda a evitar problemas cardíacos, por lo que puede ser una buena opción siempre y cuando se asesore con un profesional nutricionista que lo ayude a recibir todos los nutrientes en las cantidades que necesita en su día a día.

Almendra Parra Leal
Mail: [email protected]

Interna nutrición y dietética

Universidad Católica del Norte

Centro de Salud Familiar Pedro Aguirre Cerda

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Referencias:

• Instituto Tomás Pascual Sanz. (2010). Las proteinas. 22 de mayo 2018, de Vive Sano Sitio web: http://www.institutotomaspascualsanz.com/descargas/publicaciones/vivesano/vivesano_13mayo10.pdf?pdf=vivesano-130510 [18]

• Erosk I.. (2006). Proteinas Vegetales, combinaciones de alimentos. 22 de mayo 2018, de Consumer Sitio web: http://revista.consumer.es/web/es/20060401/pdf/alimentacion.pdf