¡A las ricas paltas! ¡Jugositas las naranjas¡!Barata la lechuguita¡ ... son vítores familiares, acogedores y chilenísimos, pero que no están presentes todos los días en la Plaza de Abastos de La Serena...los compradores deben organizarse para ir a la feria los martes, jueves y sábado y cuando se pierde la oportunidad no queda más que ir al supermercado. Los feriantes venden en otros lugares, pero como no pueden estar en todas, pierden oportunidades de venta con las personas que los prefieren, pero que no pueden asistir los días programados. Las "caseritas" podrían tener un mejor y más permanente lugar para hacer su compras de las "ricas frutas y verduras", y los vendedores mayores comodidades, de concretarse un proyecto de la Municipalidad que pretende otorgar a los comerciantes locales establecidos, una infraestructura que les permita trabajar cada día sin importar si llueve o truena. Y a pesar que el proyecto ha sido explicado a los feriantes y que les parece positivo tener "su lugar", existen dudas con respecto a los plazos y sobre todo, a los costos de los locales, puesto que actualmente son de bajo precio, aunque implican el traslado diario temprano en la madrugada y al atardecer. Varios feriantes relataron lo sacrificada que es su labor: "el día anterior compramos la verdura y hay que llegar a las 6 de la mañana para instalar el puesto, que nos demoramos una hora en armar" dijo un grupo. Además, contaron que trabajan más de doce horas de lunes a domingo.

Rodolfo dijo que "uno se acostumbra, pero es duro...nos levantamos como a las 4 o 5 para venir a armar y estar todo el día trabajando". Benjamín Arancibia, Presidente de la Asociación de Feriantes, dijo que los "verduleros" conocían el proyecto, "el problema es que falta apoyo para difundirlo, hemos tenido reuniones con el director de Serplac, arquitectos, pero no ha habido tiempo para reunirse con todos...los dirigentes estamos informados". "Hay varios que no quieren creer y tienen un temor por desconocimiento sobre los pagos, no desean endeudarse". "Yo confío que vamos a tener más clientela porque van a existir más horarios para trabajar aquí, los clientes van a estar más cómodos y nosotros también...demósle comodidad a la clientela para que vengan más", dijo Arancibia.
En resumen, el proyecto que será sometido a estudio para financiamiento con el FNDR, no municipal, podría tardar varios meses y los sacrificios seguirán para los feriantes, pero sin duda valdrá la pena para continuar con un negocio que tiene mucho de la antigua confianza entre cliente y vendedor y que no se encuentra en los megamercados.