Buscando Nuevos Lectores

23 Junio 2021
la lectura comprensiva sigue siendo una destreza poco fomentada, para esto es necesario hacer hincapié en la formación primaria, debido a que aquí es donde el interés comienza a fomentarse por medio de la herramienta del plan lector
Rojo Collao >
authenticated user Corresponsal Ciudadano
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Es un hecho que paulatinamente los hábitos de lectura recreativa son cada vez menos frecuentes en los jóvenes, esto puede traducirse por la hegemonía de las pantallas en las áreas de entretención, ya sea por medio de videojuegos, películas, series o por el simple hecho de mantener satisfecha la necesidad imperativa de comunicarse en todo momento, esto se traduce en el exponencial crecimiento del uso de redes sociales. Sin embargo, la lectura también es una destreza, una habilidad que se utiliza en todo momento.

La lectura está presente en la mayoría de los aspectos de la vida, ya sea descifrando símbolos o códigos, como también durante nuestros quehaceres cotidianos, en este ámbito las redes sociales cumplen un rol fundamental. Si bien son mensajes precisos y cortos la mantienen como una necesidad de la sociedad, por lo cual no debe ser relegada, es más en todo tipo de carreras o trabajos, tener la habilidad de leer comprensivamente funciona como una herramienta versátil y transversal, debido a que puede salvar nuestra vida como es el caso de los protocolos de seguridad e incluso ayudarnos a hacer valer nuestros derechos conociendo todos los aspectos que involucran los contratos de trabajo.

No obstante, la lectura comprensiva sigue siendo una destreza poco fomentada, para esto es necesario hacer hincapié en la formación primaria, debido a que aquí es donde el interés comienza a fomentarse por medio de la herramienta del plan lector, la cual falla en cumplir su función de construir una generación de lectores, tampoco me refiero a que la actividad favorita de todo joven sea sentarse a leer Dostoyevski con un café los sábados por la noche, o que reemplacen las jornadas de youtubers por disfrutar la literatura de Tolkien, eso es algo fuera de lo común y no se condice con el contexto que ellos están experimentando. En ese caso ¿Qué se puede hacer?

Es imperativo alejarse de las lecturas estandarizadas tan propias de nuestro sistema educativo, muchos de los considerados clásicos sí poseen propiedades narrativas y elementos dignos tanto de análisis como de discusión, pero fallan al no captar interés en los jóvenes estudiantes, lo consideran un deber, un mero trámite para alcanzar las calificaciones suficientes con el fin de aprobar la asignatura, por ende no resulta ser una motivación para ellos el involucrarse en la trama  y descubrir la impronta narrativa que cada autor plasma en su obra.

Para esto, ahondar en los intereses de los estudiantes y buscar otros tipos de lectura resulta ser un desafío imperativo para los docentes, una alternativa interesante para fomentar estos hábitos es la narrativa gráfica, esto debido al boom mediático del animé y los superhéroes en la última década. Muchos temas relevantes son planteados en este formato ya sea en el formato occidental (Comic/Historieta) o en el asiático (Manga/Manwha), llamo desde ya a no generar un prejuicio sobre este estilo artístico, comúnmente denostado debido a la presencia de dibujos. Sin embargo, la articulación entre una imagen tanto atractiva como coherente para plasmar una escena y una prosa descriptiva que pueda relatar tanto el interior del personaje como su contexto, termina siendo una amalgama que rebosa de creatividad.

El desconocimiento de ciertos tipos de expresiones genera estereotipos y prejuicios en el imaginario colectivo, muchas personas suponen que las historias son poco profundas al ser dibujadas, sin embargo, historias como 20th Century Boys de Naoki Urasawa plantean de una manera prolija e interesante un escenario de Pandemia que diezma la población mundial, todo esto ligado con los tintes de un Thriller Psicológico. Por otro lado el aclamado comic “Watchmen” de Alan Moore y Dave Gibbons (el cual por mi parte considero que debería ser lectura obligatoria en Cuarto Medio) plantea una narrativa compleja y holística en los que se tratan visiones sobre la extrema vigilancia a la sociedad, el tiempo como dimensión y la esencia de la humanidad, todo articulado en un escenario de incertidumbre política y social, estas obras son solo un pequeño ejemplo de lo versátil y plural que es este mundo de las narrativas gráficas, un escenario repleto de autores consolidados que pueden servir como el punta pie inicial para una nueva era de lectores.