Educación y rescate del patrimonio: promoviendo la experimentación

28 Agosto 2015

Nos sumergimos en la comuna de Licantén para conocer la experiencia del Liceo Augusto Santelices Valenzuela, que a través de la introducción de tecnología y del lenguaje audiovisual han logrado que sus niños aprendan y pongan en valor su patrimonio local.

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¿Cuál es la relación de los niños y el patrimonio? ¿Es posible conocer el patrimonio de un lugar desde la mirada de los niños? Para Irene De la Jara, autora del libro “Infancia y patrimonio: los objetos queridos” y encargada del Departamento Educativo del Museo de la Educación Gabriela Mistral, la relación entre niño y patrimonio puede ser bastante cercana, “una vez que al niño se le explica y comprende el concepto como algo de valor emocional,  un juguete o su madre, pueden ser parte de su patrimonio en la primera infancia”.

Por otro lado, afirma De la Jara, la relación de la infancia con el patrimonio se puede tomar como objeto de estudio en sí misma, este  ejercicio  es muchas veces poco valorado por los adultos tendiéndose a banalizar las expresiones que tienen  los niños sobre su entorno, “si un niño al dibujar el escudo o la bandera de su país la pinta con imágenes de un bosque, un río, el cielo azul, son expresiones de su entorno sociocultural, pero además muestran una  reclamación política, de cómo a él le gustaría que fuese su mundo”.

En Contenidos Locales, hemos querido profundizar en la relación de la infancia y el patrimonio, creyendo que esta es sin duda una visión de mucha relevancia, que tiene igual significancia cuando los niños, desde su mirada ponen en valor su entorno, como cuando se promueve el trabajo de los niños con el patrimonio para así asegurar su sobrevivencia y traspaso.

En la Comunidad de Licantén, perteneciente a la provincia de Curicó, Región del Maule, el Liceo Augusto Santelices Valenzuela ha generado desde hace algunos años una experiencia con el uso de tecnologías al servicio de la educación de los niños con el fin de generar nuevos métodos que acerquen, de manera novedosa, el conocimiento y que les permitan experimentar con nuevas herramientas.

Es así como a través de la adquisición de cámaras de video digitales, micrófonos, herramientas de edición junto a la ayuda de un equipo estable de profesionales en el lenguaje audiovisual,  han realizado notables producciones, las que han tenido como camarógrafos, locutores, periodistas e investigadores a sus propios estudiantes.

Para Hernán Calquin, Sub Director del Liceo y principal gestor de esta experiencia, ésta se llevó a cabo porque “sentíamos que el autoestima de nuestros niños era baja porque siempre estaban mirando que los colegios de Talca, Curicó o Santiago eran mejores, entonces llegamos a la conclusión que esto se generaba por el desconocimiento de su identidad y comenzamos a darle importancia al rescate de nuestro patrimonio”.

Así, desde hace un año se han generado distintas experiencias, la primera fue el Programa Flora Nativa, realizado por niños de cuarto básico que se encontraban pasando la unidad en su clase. Ahí se realizaron cinco cápsulas sobre un árbol o flor de la zona, en donde los niños tuvieron que investigar, desarrollar los textos, grabar las imágenes, hacer las locuciones y editar el material recogido sobre “El Boldo”, “ El Maqui”, “El Canelo”, “El Quillay” y “El Roble”, luego estos contenidos fueron subidos por sus autores a Contenidos Locales, para que este registro y material quedara a disposición de todos.

Un apoyo importante en el éxito de esta experiencia ha sido el trabajo de Gonzalo Céspedes, Técnico Audiovisual, que antes de aceptar la oferta de ir a trabajar al Liceo de Licantén, se desempeñaba en un canal de televisión en Santiago. A través de su experiencia ha enseñado a los niños el lenguaje audiovisual y la utilización de las cámaras, “los niños no se dan cuenta de lo que están aprendiendo y creando, en un comienzo se enfrentan con miedo, pero a medida que les vamos enseñando cómo se utilizan las cámaras, o cómo es el lenguaje audiovisual van tomando confianza y luego se impresionan de los resultados, se sienten  importantes y orgullosos”.

Una segunda experiencia llevada a cabo por el Liceo contó con el trabajo de los octavos básicos que en ese minuto estaban aprendiendo en Lenguaje y Comunicación cómo realizar entrevistas y construir reportajes. A partir de esto se realizaron pequeños documentales sobre la vida de personajes típicos de la comuna como “El Mani”, comerciante ambulante que trabaja fuera del Liceo vendiendo dulces y golosinas, la artesana del tejido, Marta Orrego o la historia de “La Popita”, dueña del restaurante de Licantén. Para cada uno, los niños debieron realizar una investigación del entrevistado, crear las preguntas, definir la locación y luego tomar las cámaras y grabar, siendo este proceso el fundamental para el aprendizaje.

El liceo tiene además un taller optativo, en donde se generan productos más complejos también relacionados a temas locales, en específico, hoy se está trabajando con oficios tradicionales que se encuentran al borde de la extinción, como es el caso de la producción de la última chicha de la Rosita, la actividad de los últimos herreros que reparan las ruedas de carretas, entre otras.

El producto de esta experiencia y otras que se han generado con y para la infancia se encuentra disponible en Contenidos Locales, plataforma que busca reunir en un archivo digital distintas expresiones del patrimonio con el objetivo de preservar la cultura propia de los pueblos, comunas y ciudades de Chile. Invitamos a todos quienes quieran aportar al rescate de la identidad local y principalmente a los niños y la comunidad educativa a compartir sus experiencias registrándose en www.contenidoslocales.cl