Benedicto XVI encabeza primera misa en Cuba durante su visita apostólica

28 Marzo 2012

Decenas de miles de personas siguieron la ceremonia religiosa, que conmemora el 400º aniversario del hallazgo de la Virgen de El Cobre.

Gloria Delucchi >
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El Papa Benedicto XVI celebró su primera misa en suelo cubano tras su llegada a la isla en la histórica visita pastoral que se prologará durante 48 horas.

Decenas de miles de cubanos, muchos viniendo de fuera de la isla, asisten a la plaza “Antonio Maceo” de Santiago de Cuba a la misa que oficia el Pontífice.

“Cuando Dios es arrojado fuera, el mundo se convierte en un lugar inhóspito para el hombre”, expresó el Santo Padre en su homilía.

“Queridos hermanos, ante la mirada de la Virgen de la Caridad del Cobre, deseo hacer un llamado para que den de nuevo vigor a su fe, para que vivan de Cristo y para Cristo y con las armas de la paz, el perdón y la comprensión, luchen para construir una sociedad abierta y renovada, una sociedad mejor, más digna del hombre, que refleje más la bondad de Dios”, resaltó.

El Pontífice también subrayó la necesidad de defender a la institución familiar. “Dios ha encomendado a la familia fundada en el matrimonio la altísima misión de ser célula fundamental de la sociedad y verdadera Iglesia doméstica”, expresó.

Por ello, los matrimonios han de ser para sus hijos “signo real y visible del amor de Cristo por la Iglesia”, agregó.

“Cuba tiene necesidad de testimonio de su fidelidad, de su unidad, de su capacidad de acoger la vida humana, especialmente la más indefensa y necesitada”, subrayó, en una clara referencia condenatoria a la práctica del aborto, que es permitida por el régimen cubano.

La multitudinaria  misa conmemora el 400º aniversario del hallazgo de la Virgen de El Cobre, Patrona de Cuba.

Asistió a la ceremonia el Presidente del país, Raúl Castro, quien ocupa la primera fila vestido con una camisa blanca. También estuvieron presentes los 17 obispos cubanos, encabezados por el cardenal de La Habana, Jaime Ortega, y numerosos prelados latinoamericanos.

El Papa llegó a la plaza en el “Papamóvil”, que recorrió el recinto en medio  de aplausos, vivas y cánticos de los presentes, muchos de los cuales lo esperaban desde primeras horas de la mañana, desafiando el calor y la humedad.

Los presentes, entre quienes dominaba el color blanco en sus ropas, bailaron, ondearon banderas del Vaticano y de Cuba y soltaron globos en medio de un ambiente festivo. Las vivas a la Virgen de la Caridad y cantos dedicados expresamente a ella, con sones cubanos, no cesaron en toda la jornada.

Concluida la misa, el Papa se traslada al seminario San Benito Magno, a 22 kilómetros de Santiago, en el poblado de El Cobre, a pocos metros del Santuario de la Virgen de la Caridad que visitará el miércoles antes de emprender viaje a La Habana.

El arzobispo de Santiago de Cuba, Dionisio Guillermo García Ibáñez, pidió ayuda al Papa para que el pueblo cubano busque la solución a sus problemas nacionales por medio de “la misericordia, el diálogo, el respeto y la reconciliación”.

“Ayúdanos Santo Padre, a que este pueblo no tema en hacer realidad el deseo de todos de buscar la solución a nuestros problemas nacionales por medio de la misericordia, el diálogo, el respeto y la reconciliación”, afirmó el prelado en el saludo que dirigió al Santo Padre.

García Ibáñez destacó que el Pontífice llegó a Cuba como “un peregrino de la Caridad”, la Patrona de la isla. También resaltó que es “necesario” superar todas las barreras que separan a los cubanos entre sí.

“Somos un pueblo mestizo, de culturas y orígenes diversos que se mezcló  racial, social y culturalmente en esta isla hermosa, acogedora, bendecida por Dios y difícil de olvidar, de tal manera que hoy todos, donde quiera que estemos, llevamos con orgullo el nombre de cubano”, dijo.

Agregó que “recelan” de “toda injerencia foránea en nuestros asuntos” y que están comprometidos en lograr con esperanza y decisión una República “próspera, incluyente y participativa, con todos y para el bien de todos”.

Fuentes: La Segunda, EFE, Agencias