La participación será la clave en la elección de gobernadores regionales de nuestra región

12 Junio 2021
Este domingo 13 de junio se lleva a cabo la segunda vuelta de gobernadores. Ante un panorama de incertidumbre respecto a las funciones del puesto, Krist Naranjo y Marco Sulantay pelean codo a codo para llegar al poder.
Francisco Varas >
authenticated user Corresponsal Corresponsal Ciudadano

A diferencia de las últimas elecciones, se vislumbra una menor participación en la segunda vuelta para elegir gobernadores regionales este 13 de junio. La sensación de que esta instancia no es tan decisiva como su predecesora, es la principal de sus razones. Esto traería como consecuencia un panorama menos claro respecto a los pronósticos de resultados.

 VEA TAMBIÉN: Informarnos será la clave para que el proceso constituyente sea legítimo

Sólo quedan claras dos cosas: la primera es que la gente volverá a castigar a los partidos políticos tradicionales, sobre todo a la derecha; y la segunda es que, si bien no se conocen las verdaderas facultades de este nuevo puesto institucional, es probable que ponga en jaque al centralismo que nos ha regido durante los - al menos- últimos 40 años.

¿En qué se podría traducir esto? En que las demandas llevadas a cabo por organizaciones regionales, como es el medioambiente, pasarán a ser prioridad en la agenda política. Así, cada región podrá - esperemos- determinar lo qué es más relevante para ella, y no esperar que eso lo decida un político de Santiago bien cómodo en el Gobierno, y que lejos está de las realidades regionales.

Es el inicio de una nueva forma política, pero estamos poco conscientes de aquello, como tampoco sabemos con claridad si funcionará en la práctica o sólo quedará en el papel.

Esta será la principal arma de un Gobierno que ha perdido apoyo y ha obtenido pésimas evaluaciones hacia su gestión. A mayor participación, más se parecerá el resultado de los gobernadores a la clara derrota de la derecha en las elecciones del 15 y 16 de Mayo. A menor participación, más posibilidades tienen que salgan sus candidatos, gracias a esa masa dura de gente con tendencia de derecha que siempre vota, sobre todo de sectores más acomodados.

Hay que acordarse que así fue cómo Piñera salió electo Presidente con 3 millones 500 mil votos, representando apenas un 24,8% del total de gente capacitada para sufragar (que eran 14,1 millones).

Este tema tendrá expresión viva en el caso de nuestra región. Por una parte, tenemos a un candidato que representa a ese Oficialismo fuertemente castigado, Marco Antonio Sulantay de la UDI; Y por otra, tenemos a una representante de la actual tendencia política chilena, Krist Naranjo, Independiente en el pacto de Ecologistas.

La Cámara Chilena de Construcción realizó un conversatorio llamado  “Los desafíos del primer Gobernador Regional” el día 8 de Junio con el fin de conocer las propuestas de ambos.

El primero, representante acérrimo de la política tradicional que ha construido el modelo actual, quiere poner prioridad en la reactivación económica post-pandemia, apoyando al cuestionado proyecto Dominga para generar empleos, aunque éste debe tener un mayor cuidado al medioambiente. La idea es recuperar los 90 mil empleos que se han perdido los últimos años. Además, en materia de seguridad, quiere darle mayores atribuciones a las policías, poniendo énfasis en la prevención del delito a través de la ocupación de los barrios con drones y cámaras de monitoreo.

Su rival apuesta más al cambio de este modelo, y por resolver la crisis medioambiental mediante un apoyo a los actores más afectados al respecto. Respecto a Dominga, no se declara expresamente en contra, pero sí quiere darle más énfasis a la pequeña y mediana minería, avanzando en una línea más sustentable y pareja. Para eso, habrá mayor exigencia a los grandes empresarios que han afectado a comunidades de la región (como Minera Los Pelambres en Caimanes). Por último, en relación a la seguridad, menciona que el foco principal no debe ponerse en la represión, sino más bien en la integración de la juventud marginada en temas de educación, cultura y deporte.

Los resultados de la primera vuelta fueron bastante parejos: Krist Naranjo obtuvo un 27,28% de los votos y Marco Sulantay 26,12%. Por lo tanto, los votos en disputa serán el 25,39% de Ricardo Cifuentes (Unidad Constituyente) y el 21,21% de Javier Vega (Dignidad Regional), ambos pactos más cercanos a ideas de izquierda que del Oficialismo.

Probablemente, gran parte de los votos pertenecientes a los candidatos derrotados irán para Krist Naranjo. Sin embargo, el punto clave se encuentra en la participación. Ésta será la que decida qué Gobernador Regional quede en el cargo y cuáles serán las propuestas que tendrán énfasis durante los próximos años para la región.

A mayor participación, más posibilidades tiene Krist Naranjo. La mayoría de la gente se hartó de los partidos políticos tradicionales, por lo que, si esta gente participa de las elecciones, probablemente prefiera votar por un independiente que por un representante de la política tradicional.

Ahora, independiente de quien salga este domingo, será fundamental que el gobernador electo sea capaz de enfrentar al poder de los Parlamentarios, Senadores y del Presidente, que han sido los que han tomado la batuta desde el retorno a la democracia y que han llevado a cabo este cuestionado modelo.

VEA TAMBIÉN: Un ejemplo de cómo ocurre la sequía en Chile: Luksic y el agua en el Valle del Elqui