La Revolución de los ilusos

Katharina Pavletich. Socióloga, Magister en Psicología e Intervención Social

Muchos analistas políticos han salido a intentar explicar las últimas votaciones. Algunos han dudado de la integridad de los independientes, incluso dejándolos en una especie de isla a la que nadie puede llegar porque no están dentro de este prestigioso círculo de “partidos”. Ese justamente es el objetivo. 

El voto a partidista, responde a un sentimiento generalizado de rechazo a la “clase política”, la “elite política” de la que nadie hoy quiere ser parte. Hoy se vota por proyectos, no por el más conocido. Queremos recuperar nuestro país y el foco será independiente, porque en ello se centra la esperanza, las cenizas aún ardientes de la revolución que se inició en Octubre del 2019 y que vemos replicada en otros países en Sudamérica. Porque Chile despertó y de la mano de independientes genera verdaderos cambios. 

Se logró tener 17 cupos reservados para pueblos indígenas originarios, aunque siguen siendo pocos y muy limitados. Hay paridad entre mujeres y hombres, algo inédito y un logro histórico. Buscamos un avance inclusivo y esperamos que quede reflejado en la Constitución, hay mucho camino por recorrer, pero como ciudadanía seguiremos luchando y participando en el proceso constituyente.

Más de 1 millón de personas que no habían votado nunca, fueron a votar. Por más que se nos quiera restar piso, la revolución de los ilusos es real. Nosotros que sin partidos queremos cambios, sin ese “valioso” apoyo partidario que seguramente fue efectivo en dictadura, hoy arde bajo el voto de la gente, que exige dignidad. El Chile del futuro, el Chile que soñamos estos ilusos, es el que no deje atrás a nadie.