Campesinos muestran lo mejor de la gastronomía de La Serena

Las localidades rurales de La Serena poseen una fortuna particular y no hablamos sólo de su paisaje libre de contaminación lumínica, ni de su olor a tierra mojada o de sus pobladores tan cálidos y llenos de historias, sino que nos referimos a su inmenso patrimonio gastronómico, que con el paso de los años, en vez de disolverse, parece que cada vez cobra más fuerza y calidad.

Esto, junto al inminente fenómeno astronómico del próximo 2 de julio de 2019, posiciona a la zona campestre de La Serena como un sector de gran atractivo turístico, donde sus habitantes ya se están preparando para mostrar sus más finas recetas y tradiciones. Un recorrido por Condoriaco, La Quebrada de Arqueros y Almirante Latorre, permitió conocer de primera fuente el proceso de preparación de los diferentes productos típicos de la zona norte de nuestro país.

El reloj marca las 6:30 de la mañana y el sol aún no se asoma por los cerros pedregosos, pero esto no es impedimento para el quehacer diario de Fernando Cox, criancero de Quebrada de Arqueros en la majada La Chancaca, quien se levanta en este horario para ordeñar a sus cabras y luego colar la leche, un proceso que realiza con gran minuciosidad. Y espera, con esa paciencia característica que posee quien lleva años en el rubro, que el contenido esté listo para ser transformado en queso.

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“La leche debe colarse bien y es preciso dejarla al menos una hora para que se corte, luego se revuelve y comienza el procedimiento para hacer el queso”, explica mientras va realizando cada una de las etapas.

De la misma forma, María Ángel es conocida en el sector de por sus exquisitas mermeladas y dulces de membrillo, las cuales dice, prepara con un ingrediente secreto dejado por sus ancestros. Son estas recetas las que continúan mejorando para el próximo 2 de julio de 2019, instancia en que espera dar a conocer sus mejores productos y resaltar la riqueza gastronómica y tradicional de nuestras localidades rurales. “Será una oportunidad buena para nosotros los campesinos para promover el ecoturismo y muchas cosas bonitas que hay en el campo, hay muchas cosas en qué entretenerse, paisajes hermosos, animales como zorros y vizcachas, aquí tenemos el privilegio de una vida sana y tranquila”.

De la misma forma, Felisa Cox, hermana de Fernando, quien reside en el sector de Condoriaco, comentó que es sabida la cantidad de espectadores que atraerá el eclipse y que, por lo mismo, están tomando medidas para recibir de la mejor forma posible a los turistas. “Dicen que va a llegar mucha gente y se les atenderá como corresponde. Tengo experiencia atendiendo a personas norteamericanas, conozco sus gustos y eso servirá para esta ocasión. Es necesario que todos nos preparemos, ya que precisarán de alojamiento, duchas, baños y alimentación”.

Entre tanta riqueza material y gastronómica nadie queda indiferente, pero uno de los factores que siempre preocupa a los consumidores, son las condiciones en que se encuentran los animales, lo que se traduce finalmente en la calidad del producto. Para esto, Marcelo Espinoza, médico veterinario del Programa Prodesal- Padis de la municipalidad de La Serena, realiza visitas continuas en estos sectores para examinar el estado de los animales. “Trabajamos con usuarios de lugares alejados de la comuna, prestando asesoría técnica en el área pecuaria y agrícola. Realizamos registro de base de datos de las cabras, protocolo de selección de ganado caprino, de manera de escoger los mejores, tomamos datos como peso, edad y control lechero para medir el rango productivo que tienen y se genera un protocolo de alimentación para el rebaño para así lograr una mejora en la producción”, explicó.

Debemos tener en cuenta que más de 80% del territorio de La Serena es rural, donde viven poco más de 17 mil personas, con lo que podemos entender que esta ciudad es más que sus principales íconos como el Faro o la popular Recova, sino que también integra una vasta historia en sus lugares más recónditos, que hoy por hoy, se alzan como protagonistas de un hecho mundial e histórico para nuestro país: el eclipse solar de 2019.