Cómo prepararse para la revisión técnica

La revisión del estado general del vehículo debería ser una actividad frecuente, con procesos semanales, que le den tiempo al conductor para corregir algunos defectos antes de la revisión técnica obligatoria. No tener este examen aprobado puede traer como consecuencias altos costos para los conductores, por ejemplo, conducir sin ella es una falta grave que es multada con un valor de 1 a 1,5 UTM. Para no tener problemas con esta prueba Eduardo Olivares, Sub Director Escuela de Ingeniería de AIEP nos entrega los siguientes consejos:

1.- Estados de las luces. Se recomienda revisar el correcto funcionamiento de los focos principales, luces altas y bajas, luces de la placa patente, de retroceso y de emergencia. Comprobar el estado de la luz de estacionamiento posición, adelante y atrás. Además, de verificar la señalización de viraje delante y atrás.

2.- Gases emitidos. Se miden los gases sobre un dinamómetro de rodillos en dos formas, ASM 5015 y ASM 2525, esto corresponde a un 50% de carga a 15 millas por hora y un 25% de carga a 25 millas por hora.Se miden el monóxido de carbono (CO), hidrocarburos (HC) y óxidos de nitrógeno (NOx).

“Un porcentaje alto de CO se relaciona con combustión incompleta, como chispa pobre de las bujías, filtro de aire sucio y desgaste del motor. Un alto contenido de HC indica principalmente, aceite ingresando a la cámara de combustión por desgaste del cilindro y anillos o por desgaste de guías de válvulas. Por último, un alto contenido de NOx indica que el convertidor debe cambiarse, suele presentarse junto con una falla en la sonda lambda”, explica Olivares.

Estos temas se pueden mejorar cambiando el filtro de aire, en tanto las bujías se pueden arreglar usando un aceite de motor de mayor viscosidad, cambiando el catalítico y revisando si la sonda lambda funciona correctamente.

3.- Filtraciones de gas en la línea de escape. Suele suceder que después de salir del motor los gases quemados van al múltiple de escape, convertidor catalítico, cañería y silenciadores. Esto se resuelve soldando las zonas perforadas o reemplazando las piezas perforadas por corrosión.

4.-Elementos de seguridad. No hay que olvidar que todos los artefactos y material de seguridad deben estar en buen estado y es por eso que hay que revisar minuciosamente el estado de los cinturones, vidrios y asientos. Además, hay que examinar el correcto funcionamiento de los cierres de puertas, las solturas del tren delantero, la capacidad de frenado, el estado de los neumáticos y la dirección.

Olivares es enfático en señalar que “estos temas deben resolverse porque afectan la seguridad de los ocupantes del vehículo y de todos quienes compartimos las calles”.

Finalmente, se recomienda usar el vehículo intensamente antes de ir a la revisión para limpiar de residuos el tubo de escape y llevar el auto con el motor caliente, de esa forma el convertidor catalítico funcionará mejor.