Con emotiva velatón en su jardín infantil en La Serena despidieron a niño asesinado en Molina

Ya no quedan lágrimas. Ha sido un golpe duro y cruel para las tías del jardín infantil "Pequeñitos del Valle" la muerte de quien fuera su alumno en el 2014, Ángel Márquez, quien fuera asesinado, presuntamente por su madrastra, en un caso que ha remecido al país.

Y es que las educadoras habían detectado una historia de maltrato y abuso contra el menor, que denunciaron a todas las instancias respectivas, pero que finalmente no llegaron a buen término en el Tribunal de Familia, donde se dictaminó que el menor siguiera bajo el cuidado de su padre y madastra, con las fatales consecuencias que ello acarreó.

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"Esto se pudo haber evitado" comenta entre lágrimas Nidia Castillo, tía del jardín que denunció los hechos en reiteradas ocasiones. "Tengo rabia, impotencia, ojalá que esto no se vuelva a repetir, porque quedamos con la sensación de que esto se pudo haber evitado si se hubiesen tomado las medidas", señala.

En el frontis del jardin infantil ubicado en el sector de La Florida, en La Serena, una misa y una velatón, fueron el corolario del último adiós de quienes conocieron a Ángel. Sus profesoras, apoderados y compañeritos lanzaron globos blancos al cielo para decirle adiós, con la esperanza de que su muerte no sea en vano, y de aquí en adelante, el Estado promulgue una ley integral de protección a los niños y niñas.

Fotos: Carlos Ruiz B.