Habla el primer caso de Covid en la región: “Fueron meses terribles, estuve a punto de morir”

El 16 de marzo de 2020 fue un día que marcaría un antes y un después en la vida de Carolina, Asistente Social de 38 años. “Venía de un viaje de vacaciones con una compañera. Días antes nos enteramos que se estaba propagando el virus del Covid-19. Llegamos el domingo al mediodía y no quise tener contacto con mis hijos por precaución, teniendo en cuenta que venía del extranjero (algo que sin duda sería un gran acierto)”, nos cuenta.

Al llegar el lunes, como cualquier comienzo de semana, se presentó en su trabajo en la sucursal IPS de La Serena donde cumple su rol de ejecutiva de atención, momento en el cual su jefatura le ordenó inmediatamente realizarse el examen de forma preventivo. 

“En mi trabajo se siguieron todos los protocolos y es por ello que concurrí el lunes temprano a realizarme el examen junto con mi compañera, luego de lo cual se me ordenó ir a mi hogar a esperar los resultados”, comenta. 

El primer caso y los primeros síntomas

“Estaba en aislamiento total en mi hogar cuando recibí la llamada en la cual me informaban que había dado positivo al examen del Covid 19. Fue muy fuerte porque éramos los primeros casos en la región, lloré mucho, me preocupé mucho por mis hijos (una pequeña de 9 y un hijo de 18), pero afortunadamente sirvió que no tuviera contacto con ellos por lo cual no se contagiaron”, señala.  

De ahí en más llegaron los equipos médicos a su hogar y en esos momentos ella no presentaba síntomas. “No me sentía mal el miércoles, pero al día siguiente comencé con dolores de cuerpo muy intensos, alza de presión, pérdida del olfato y del gusto, taquicardia y un dolor de cabeza insoportable”, expresa.

Al borde de la muerte

Carolina quedó bajo la modalidad de “Hospitalización Domiciliaria” en su hogar, aislada de sus seres queridos. “Estuve muy mal por varias semanas, solo podía ver a mis hijos por una ventana, ellos me daban fuerzas para no decaer. Me alimentaba por sondas, estuve 1 mes sin comer ni tomar agua, no tenía fuerzas ni siquiera para pararme pues los dolores eran muy fuertes, bajé 12 kilos”, señala.

Fue así como un día se agravó y debió ser trasladada de urgencia a un centro hospitalario. “Un día en la noche me sentí muy mal y me llevaron en ambulancia al hospital. Recuerdo poco de ese entonces, solo que mis hijos y mi pareja veían que me llevaban y me decían que tenía que volver, que no podía perder esta batalla. Había sufrido un paro cardiorespiratorio y estuve a punto de morir”, nos cuenta. 

Un cumpleaños diferente

Una semana después sortear ese episodio, llegó el 16 de abril, la fecha del cumpleaños de su hija Anto. “Mi hija cumplía 9 años y fue un cumpleaños totalmente diferente. Prácticamente no me podía mover, pero me armé de fuerzas y pude escribirle en un papel: feliz cumpleaños, ella me miraba desde el otro lado de la ventana y todos llorábamos, son cosas que te marcan para siempre”, indica. 

“Mátenlas, quémenlas”

Durante los primeros días, cuando se dio a conocer de los 2 primeros casos de Covid-19 en la Región de Coquimbo, Carolina vivió horas de terror. 

“Mi hijo leía en las redes sociales que la gente escribía “mátenlas”, “quémenlas” y otro tipo de insultos hacia mí y mi compañera, por ser los primeros casos en la región y porque se pensaba que habíamos atendido público el día en que llegamos a nuestro trabajo, algo que nunca fue así pues no alcanzamos a tener contacto con público ya que fuimos enviadas inmediatamente a realizar el examen, pero aún así fue muy fuerte que tus hijos vieran o leyeran cosas como esas”, nos dice. 

El alta y el teletrabajo

Después de 2 meses muy duros en los que debió lidiar contra el virus, Carolina finalmente pudo vencer al Covid y fue dada de alta el 5 de mayo. “Me sentí muy aliviada, recibí mucho apoyo durante todo ese tiempo de mis compañeros de trabajo, de mi jefatura, del personal del hospital de La Serena y finalmente pude ser dada de alta”.

Hoy se encuentra con teletrabajo desde su hogar, donde de lunes a viernes atiende público a través de televideo. “Pude acogerme a la ley de teletrabajo y estoy desde mi hogar cumpliendo labores, principalmente de atención de público y resolución de casos, espero que siga siendo solo un mal recuerdo lo que viví”, agrega.

El Covid no es un juego

Carolina finalmente hace un llamado a que la gente le tome el peso a esta enfermedad. “Mucha gente cree que el Covid no es dañino, que es solo como una gripe, pero no es así, en mi caso sufrí mucho pero afortunadamente pude vencerlo. Debemos cuidarnos entre todos como dice el slogan”, expone.