Isla de Pascua y plástico: relación desafiante con resultado ejemplar

El encanto de la Isla de Pascua trasciende la belleza y misterio de sus paisajes. Este Patrimonio de la Humanidad cuenta con una cultura muy diferente a la del común de los chilenos. El amor y defensa de su tierra se vive consecuentemente cada día a través de una constante y dedicada labor de cuidado de sus costas. Se trata de un caso ejemplar que saca lo mejor de cada pascuense, a la vez que va revelando lo peor de los hábitos continentales.

“Islas oceánicas: Testigos del viaje de los Plásticos” es el nombre del proyecto que llevó a los Científicos de la Basura hasta Rapa Nui. El motivo fue conocer la situación actual de la basura marina que viaja por el  giro subtropical del Pacífico Sur, hasta llegar a las costas. El equipo cuenta con el patrocinio de la Universidad Católica del Norte (UCN), el Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (CEAZA) y el programa EXPLORA CONICYT.

 “Nosotros vivimos en el agua, igual que los peces” dice Mama Piru, ecologista  y encargada de la planta de reciclaje Orito en Rapa Nui. La respetada mujer explica que hace 15 años se tomó el desafío de erradicar los desechos que flotan en las aguas y que viajan desde el continente.   

Redes de pesca, boyas de diversos países, entre otros, son algunos de los residuos pesqueros  que casi de manera íntegra llegan a los recovecos de las  playas. Otra historia son los residuos continentales, pues esos viajan a través de los giros oceánicos, fragmentándose hasta convertirse en microplásticos atrapados en la arena de las costas. Durante su paso por el mar dañan a peces, aves, tortugas y otros organismos.

Los líderes locales en el tema de la basura marina mostraron la problemática al equipo de los Científicos de la Basura, recorriendo variados puntos de la isla; además desarrollaron actividades en conjunto tendientes a comunicar la gravedad del problema. En este contexto es que  el equipo visitante fue invitado a  participar en el Festival Tapati, con la creación de un mapa de desechos marinos de 100 m2 de basura marina. La exposición posibilitó la entrega de información a cientos de turistas y vecinos, cooperando así la  divulgación del impacto de las costumbres humanas continentales y la búsqueda de soluciones.

La I. Municipalidad de Isla de Pascua está muy comprometida con la misión de mantener el entorno limpio, pero además hay grupos de voluntarios isleños que cuidan ese pequeño y único pedazo de tierra de 160km2. Las patrullas trabajan en conjunto para mantener el ecosistema libre de plástico.

Celeste Kroeger, miembro del equipo visitante, señala que a diferencia de lo que ocurre en el continente “las fuentes de basura no son locales, se trata de elementos externos instalados tras semanas, meses y años de viaje por el mar; la basura marina en la isla es una muestra del grave problema que tenemos en nuestro océano Pacífico, y es nuestro deber de acompañar a los isleños en el combate y la mejora de esta situación.

La bióloga marina Paloma Núñez agrega que “las islas son ecosistemas frágiles y expuestos, y funcionan como indicadores de la salud del océano. Toda la basura deja una huella ecológica”. Sobre lo mismo Mama Piru enfatiza que “podemos saber exactamente de dónde proceden los materiales que llegan a las orillas”.

Las muestras de arena tamizada recolectadas en la isla fueron enviadas hasta la Facultad de Ciencias del Mar de la UCN en Coquimbo donde serán expuestas a la comunidad.

Las actividades de “Islas Oceánicas: Testigos del viaje de los plásticos”, continuarán durante febrero por las costas  de la IV región, partiendo con actividades el día jueves 13 de febrero. Durante el día habrá exposiciones y juegos en Playa la Changa, y en la noche el Centro Cultural Palace abrirá sus puertas a las 20:00 horas para una charla llamada “El plásticos en los océanos”. El acuario de UCN estará abierto durante todo el mes de Febrero a todo público y contará con la guía de divertidos monitores (10:00-18:00).