Misionera chilena en Africa comparte su experiencia en la Región de Coquimbo

03 Noviembre 2014

Dos años en Camerún y ya tres en Mozambique, resumen las diversas experiencias que ha venido a compartir en iglesias cristianas de Chile y de nuestra región, Rocío Silva.

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De visita en nuestro país, esta chilena cristiana perteneciente a la Congregación Independiente ICLAM (Iglesia Comunidad Luz al Mundo) lleva alrededor de cinco años cumpliendo una importante misión en África, donde como ella señala su gran sueño es formar vidas que aporten a la sociedad de ese necesitado país.

Dos años en Camerún y ya tres en Mozambique, resumen las diversas experiencias que ha venido a compartir en iglesias cristianas de Chile y de nuestra región, Rocío Silva; quien tiene la valiosa responsabilidad de aportar con educación y valores cristianos a más de 40 niños africanos actualmente en el sector donde ella interviene con su labor misionera.

Siendo África uno de los países más bajos en el Índice de Desarrollo Humano, resulta fundamental la ayuda que misioneros como Rocío pueden otorgar. En este fin de semana, estuvo compartiendo su experiencia en Coquimbo, específicamente en la Iglesia Cristiana Jesús Camino de Vida, del sector de Tierras Blancas donde uno de los mayores énfasis entregados fue valorar las ventajas del desarrollo país que existe en comparación con la realidad que se vive al otro lado del orbe y el compromiso que debe seguir fortaleciéndose con ayudar a quienes trabajan en esa importante misión.

Rocío, ¿Cómo nació la intención de misionar en África?

“Fue un llamado del Señor y donde también influyó el haber crecido en la generación de ver en televisión el sufrimiento de África, por lo que siempre estuvo en mi corazón hacer algo para aminorar la extrema necesidad que existe allá.

¿Cuántos niños están a su cargo y qué necesidades cubren o apoyan?

Aproximadamente tengo alrededor de 40 niños que participan de las clases y actividades que realizamos, los que son desde 3 hasta los 12 años en promedio. ProVisión es la organización que nos entrega el dinero para efectuar la ayuda y que se resume en aporte de personas que se sensibilizan sobre esta causa, lo que nos permite comprar ropa, zapatos, útiles escolares, además de darles desayuno y las necesidades urgentes que tengan nuestros menores, pero donde lo más importante es entregarles el mensaje de la palabra de Dios.

Es clara la diferencia económica y de desarrollo entre Chile y África, ¿Cuál es la reflexión que más destaca de aquello?

En comparación con África, Chile es excesivamente rico. Me sorprende y me hace pensar la percepción que muchos niños y jóvenes chilenos tienen sobre esto, ya que en Chile es signo de pobreza no tener el último celular o juego tecnológico, mientras que en África hay niños que incluso sólo pueden acceder a comer una vez al día. Creo que la realidad en la sociedad chilena, nos hemos contaminado con este sistema materialista, por lo que creo que a veces es bueno preguntarse si el dinero o lo que tienes materialmente es lo que si verdaderamente nos hace felices y cuánto pensamos en ayudar a quienes realmente no tienen ni la mitad de lo que nosotros tenemos.

¿Cuáles son las principales necesidades que tienen o se puede aportar con ayuda en su trabajo de misiones?

Dios nos ha provisto en este periodo gracias a la ayuda de muchos, pero a futuro tenemos proyectos donde necesitaremos más aportes que sigan bendiciendo la vida de nuestros niños. Actualmente, las clases y actividades las realizamos en mi casa en Mozambique, pero sería valioso poder contar con un lugar específico y de mejores condiciones para aquello.

¿Cuál considera que han sido los logros hasta la fecha de su misión en África?

Aunque son pequeños grandes logros, uno de ellos es que nuestro trabajo de misiones sea respetado dentro de la sociedad africana, en el sentido de generar confianzas y vínculos con las personas de allá.  A mis niños los he visto crecer, madurar y mostrar los valores que se les entregan. Y porque mi sueño más que formar iglesias en África es formar vidas que afecten a la sociedad, con el valioso cambio que hace Dios en nuestras vidas y donde podría contar de muchos testimonios de niños africanos que sin duda pueden ser agentes de cambio para una sociedad con mejores principios de vida.

Rocío Silva estará hasta enero del 2015 en nuestro país para luego regresar a su trabajo misionero en África. Quienes deseen aportar a esta importante labor se puede realizar por medio de la cuenta corriente Nº E119524701 del Banco Security que tiene ProVisión, para distribuir dichos recursos para el trabajo misionero como el que realiza Rocío. Para confirmar dichos aportes o generar intenciones de ayuda en esta causa puede escribir al correo electrónico [email protected]. Muchas nuevas vidas en África lo agradecerán.