Recorre Coquimbo con un saco al hombro: Desalmados robaron carro a recicladora

04 Mayo 2021
[VIDEO] Con una fuerza increíble, Rosa Rojas busca papel, fierro, vidrios y todo lo que se pueda vender para ayudar a su familia. Necesita un nuevo carro para ella y un computador con internet para su hija.
René Álvarez Ur... >
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Rosa Rojas, ejemplo de trabajo y esfuerzo en Coquimbo.

Rosa Rojas recorre Coquimbo todos los días del año, transita por calles, pasajes, sitios eriazos y callejones, todo para recoger lo que muchos consideran basura. Ella es una recicladora de base que está cansada de tanto andar, de hacer fuerza y de tratar de salir de la línea de la pobreza, lo que le cuesta mucho, más cuando la sociedad se la pone difícil. 

Hace poco tiempo un inescrupuloso le robó su “yegua de carga” o carro de trabajo, con toda su preciada mercancía, vale decir, cartones, vidrios y uno que otro fierro.

Luego de un día de trabajo volvió a su casa en la Parte Alta. Cansada y hambrienta, prefirió entrar para comer algo antes de comenzar a seleccionar lo recolectado durante la jornada, ingresó al domicilio, saludó a la familia, se preparó una taza de té y compartió algunos minutos, luego salió a terminar la misión y la impotencia se adueñó de ella, alguien, amante de lo ajeno, se había llevado el carro y todo lo que estaba perfectamente ordenado sobre él.

De ahí en adelante el trabajo se ha hecho más difícil y cansador, a veces carga pesadas bolsas al hombro, otras veces recoge coches de bebé de la basura y los usa para avanzar, al poco tiempo sus ruedas sucumben al peso y a los muchos kilómetros que recorre a diario, ocasión en que vuelve a atar dos sacos con un cordón y se los pone al hombro porque de alguna forma hay que llegar a las empresas que compran su preciado botín. 

A veces la acompaña su hija Jocelyn, que cursa 8° año en el colegio Santa María del Refugio, una adolescente que sueña con ser una influencer y trascender en el competitivo mundo de las redes sociales. Utopía si consideramos que solo cuenta con un teléfono antiguo y que rara vez es recargado con $2.000 para tener internet, tecnología que usa para conectarse a clases y aprender dentro de lo posible.

Rosa dice que todos los sacrificios que hace son para que sus hijos no repitan el papel protagónico que le tocó a ella actuar en la vida. Tiene claro que se merecen más y mejores oportunidades, que tienen derecho a subirse al tren del progreso. Solo quiere verlos felices, disfrutando de sus etapas y viviendo de manera tranquila, sin tener que pensar si al día siguiente habrá algo en la mesa para comer.


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AYUDA

Como mujer fuerte dice que seguirá trabajando para lograr su gran meta, porque considera que lo que hace es honesto, digno y donde pone gran pasión. A veces hay gente que le brinda una mano, pero dice que son muchas más las ocasiones en que la apuntan con el dedo y critican su actuar.

Luego de una larga conversación pudimos conocer algunas de sus necesidades mayores, claramente requiere un triciclo, carro, carretilla o algo que haga más liviana su faena, se lo merece.

También hay que apoyar la educación de Jocelyn, y para ella es prioridad que tenga un computador o Tablet con una conexión estable y permanente a internet. Obviamente, y como se pueden imaginar, hay otras necesidades que como familia sacan adelante con dificultad y en donde cualquier apoyo es bienvenido: vestimenta y alimentos jamás están demás.

Para quienes puedan apoyar a Rosa y su familia, la pueden contactar en el +56991756023 o conocerlos en su casa ubicada en Camino al faro 63, en la Parte Alta de Coquimbo.

Siempre es posible brindar una mano solidaria, más en estos tiempos en que la pandemia ha puesto más piedras en el camino de tantas familias que viven en un permanente y largo otoño. A veces solo es cosa de tomar la decisión y actuar.

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