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Dada las consecuencias provocadas por la pandemia del COVID-19 [2], muchas personas han sufrido problemas para adquirir enseres de primera necesidad. Esta situación la han experimentado, entre miles de otras personas, los internos de los centros penitenciarios a lo largo del país. 

Por este motivo, es que la Pastoral Carcelaria de la Arquidiócesis de La Serena motivó una campaña solidaria consistente en reunir papel higiénico para ser distribuido entre los internos de la cárcel de Huachalalume, iniciativa organizada por la Pastoral de la Universidad Católica del Norte, sede Coquimbo, y el Movimiento de Padres en el Espíritu (EPE) del colegio Calasanz, entre otros, ayuda que fue recibida con gran gratitud por quienes se encuentran privados de libertad.

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¿EN QUÉ CONSISTIÓ?

“Ya el año pasado colaboramos con artículos de aseo personal y en esta oportunidad, dado que hay internos con PCR positivo a Coronavirus, y no han recibido visitas, se acordó materializar una ayuda consistente en 160 packs con 4 rollos de papel higiénico”, expresó Diego Díaz, integrante de la Pastoral de la UCN Coquimbo.

“Señalar igualmente que en la campaña también participaron colegios, grupos católicos y movimientos espirituales, quienes trabajan permanentemente con personas privadas de libertad”, agregó. 

Quienes también dijeron presente, fueron los miembros del Encuentro de Padres en el Espíritu del colegio Calasanz, ubicado en Tierras Blancas, Coquimbo. Entre los beneficiados se encuentran hombres y mujeres de 36 módulos de la cárcel de Huachalalume. 

“En este tipo de recintos, las necesidades son múltiples y las ayudas son siempre escasas. La idea es apoyarlos de diversas maneras. Es importante que como movimientos católicos estemos presentes con los que más sufren. Son en ellos donde vemos representada la obra de Cristo y hemos querido entregarles un granito de arena”, expresó Claudio Alday, integrante del EPE.