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Es muy probable, que usted o alguno de sus seres queridos fumen y beban con frecuencia, pero vivan sin conocer la existencia de los cánceres de cuello y cabeza. Pese a ello, este conjunto de enfermedades cobra la vida de más de 400 personas cada año en Chile y el 75% de las veces, su aparición podría tener su origen en estos dos vicios.

De hecho, el tabaco aumenta hasta en 17 veces la probabilidad de padecer estas patologías y si a ello se le suma el consumo de alcohol, esta combinación puede ser letal.

El doctor Juan Manuel Scarton, Jefe de la Unidad de Cabeza y Cuello del Hospital de La Serena, explicó que “generalmente, aquellas personas que consumen más de 10 cajas de cigarrillo al año, son considerados ya de mediano riesgo y aquellas que fuman más de 20 cajas, de alto riesgo. Las personas que sólo fuman, tienen menos riesgo que aquellas que fuman y beben a la vez. El riesgo está en una persona que consume en promedio de 15 a 20 cigarrillos al día, que por lo general, también necesitan beber, no sólo en situaciones ocasionales sino que constantemente todas las semanas”.

En nuestro país existen alrededor de 700 nuevos casos de este tipo de cánceres anualmente, siendo más frecuentes en hombres que en mujeres y la edad promedio de las personas que la padecen va por encima de los 50 años.

Aunque esto ha ido cambiando, afectando cada día a más jóvenes, producto de las prácticas sexuales inseguras. Y es que se ha comprobado la relación entre estos tumores malignos y el Virus del Papiloma Humano (VPH), pudiendo aumentar el riesgo de desarrollar estas afecciones, debido a las infecciones que se producen por la transmisión del VPH mediante el sexo oral.

Asimismo, la radiación ultravioleta, una dieta deficitaria en vitaminas A y C, antecedentes genéticos, la escasa higiene bucal y la continua fricción de zonas de roces de prótesis dentales mal ajustadas aumentan el riesgo de sufrir estos cánceres.

PELIGROSA ENFERMEDAD

El cáncer de cabeza y cuello es un grupo de tumores malignos que se pueden localizar en la cavidad nasal, los senos paranasales (pequeños huecos que existen alrededor de la nariz), la cavidad oral, la laringe, faringe, lengua, esófago o glándulas salivales.

Estos cánceres pueden tener importantes consecuencias para las personas que los padecen, quienes pueden ver sumamente afectada su calidad de vida, e incluso, morir a causa de ellos. El doctor Scarton señaló que aquellos que consultan en forma más tardía, pueden llegar, por ejemplo, a perder parte de la mandíbula, lengua, segmentos óseos y diversas zonas de la cara, con devastadores efectos funcionales y generando dificultades para acciones tan vitales como hablar, comer o respirar.

SEÑALES DE ALERTA

En muchas ocasiones, la falta de síntomas específicos o su similitud a aquellos asociados a otras afecciones más comunes, hace que este tipo de cánceres no sea detectado a tiempo. Por eso, es muy importante permanecer atentos a las personas que fuman y beben con frecuencia o que presenten otro de los factores de riesgo mencionados.

Los síntomas que pueden asociarse al cáncer de cabeza y cuello dependen de la zona en que se localice el tumor, pero algunos de ellos corresponden a crecimiento progresivo de bultos, que sangran o duelen, aparición de masas en el cuello, dificultad para tragar, disfonía, pérdida de peso, sudoración nocturna, saliva con sangre, nariz taponada y pérdida espontánea de piezas dentales.

“Es muy importante ir al médico o acudir a su centro de salud más cercano si usted detecta en su cara cualquier lesión que sangre o se descame o un nódulo que se eleve, principalmente en aquellas zonas de alto riesgo, como los ojos, sobre los labios y la región nasal, que son las que reciben más radiación ultravioleta. También debe estar atento si presenta problemas o dolor para tragar, cambios en el tono de voz, dolor constante en el oído o cualquier aumento de volumen en la zona del cuello y el rostro”, puntualizó el médico cirujano del hospital serenense.

Los cánceres de cabeza y cuello pueden tener grandes posibilidades de tratamiento y sobrevivida si son detectados a tiempo, mediante un examen físico o pruebas de diagnóstico. Los tratamientos pueden incluir cirugía, radiación, quimioterapia o una combinación de ellos.

“El área de cabeza y cuello, a diferencia de otras zonas del cuerpo, es de fácil acceso al examen físico. En la cara resultan muy evidentes, pero también se puede abrir la boca del paciente, tomar un espejo dental y evaluar, se hace punción con una aguja o se palpa el cuello para ver si hay aumento de masa, o haciendo una simple ecografía, se puede tener una gran aproximación diagnóstica”, detalló el especialista.

¿CÓMO PREVENIRLOS?

Según la Sociedad Chilena de Cirugía de Cabeza y Cuello y Plástica Maxilofacial, resulta crucial mantener un estilo de vida saludable y evitar los excesos. Una dieta variada, mantener una buena higiene bucal, acudir regularmente al odontólogo e identificar tempranamente afecciones precancerosas es fundamental también.

Al respecto, Scarton indicó que es muy importante “saber cuál es la causa de por qué la persona fuma, generalmente puede estar asociado a una situación de depresión u otras causas de salud mental. Hay una manera de des-escalar su consumo, mediante terapia psicológica, dando orientación e intentando darle a la persona una mejor calidad de vida. También es fundamental evitar que aquellos que consiguieron dejar de fumar, recaigan”.

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