Con positivo balance ATEL culmina programa de incentivo al emprendimiento

21 Mayo 2014

Entre otras cosas, lograron conseguir en comodato un espacio para el desarrollo de las artes escénicas. 

Alicia_Acuña >
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En el Centro de Innovación de las Artes Escénicas, CIES, se efectuó el  seminario de clausura del Programa de Apoyo al Entorno Emprendedor, PAE, de la Agrupación de Teatristas del Elqui, ATEL, que fue ejecutado por la entidad, coejecutada por la Corporación Matucana 100, financiado por CORFO, y que contó con el apoyo del Consejo Regional de la Cultura.

Gustavo Dubó, director (s) de Corfo, destacó que este fue el primer proyecto de este tipo financiado por la institución en el país. “Su ejecución significó ser pioneros en este ámbito. Creo que los objetivos se cumplieron con creces ya que consiguieron instalar capacidades de gestión que se manifiestan al haber suscrito contratos y, además, el comodato de esta infraestructura”.

Para Ingrid Slomp, directora del PAE de ATEL se alcanzaron con creces los objetivos planteados. “Hay que estar conscientes que se trata de una experiencia única en su tipo. A pesar de las dificultades hubo importantes alcances como la gestión de negocios, estableciendo levantamiento y relación con stackholders, empresas privadas y públicas, en áreas de Responsabilidad Social Empresarial, instaurando nuevos nichos y oportunidades; siendo este ámbito la línea de desarrollo que implicara la sustentabilidad económica de espacio CIES y de Teatristas Elqui”.

La directiva de Atel, representada por Héctor Álvarez e Ivania Escobar, realizó un balance de la ejecución del proyecto. “Fuimos parte de un programa formativo desarrollado por M100, que se centró en el perfeccionamiento de habilidades relacionadas con la gestión cultural. También pudimos poner en prácticas estos conocimientos a través de la implementación de actividades pilotos como organización de presentaciones, eventos y otros”, explicaron.  

Por último, Juan Pablo Rosales, director del CEAT, Centro de experimentación artística Tessier, CEAT, Recoleta, relató su experiencia en el manejo de este espacio cultural, la que no estuvo exenta de dificultades, puesto que su labor ha sido casi en un cien por ciento autogestionada. “Nuestro nicho se ha dirigido hacia el apoyo del teatro emergente. Esto, nos ha entregado excelentes resultados”, sostuvo. 

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