A pesar que durante la madrugada del martes los trabajadores del Servicio Nacional de Menores (SENAME) y el gobierno, llegaron a un preacuerdo monetario, en nuestra Región de Coquimbo, los dirigentes y funcionarios votaron en contra de la propuesta presentada por el ejecutivo.
Esta decisión mantiene por tanto, paralizado el trabajo de los funcionarios en el SENAME, quienes votaron NO junto a otras 6 regiones del país.
Si bien la dirigenta nacional del SENAME, Alicia del Basto, no quiso adelantar los detalles de la propuesta que realizó el gobierno, señaló que ésta se acerca bastante a sus peticiones, pero que la decisión final debe ser tomada por los trabajadores del organismo a nivel nacional.
Ante el panorama, el dirigente regional del SENAME, Eduardo Cortés, señaló que en la cuarta región los trabajadores están esperando la decisión que se tome a nivel nacional, aunque reconoció que el ideal de esta manifestación es lograr el 100% de las solicitudes.
Asumiendo que la toma puede terminar en cualquier momento de acuerdo a lo que vote la mayoría nacional, Cortés fue enfático al señalar que sus principales demandas apuntan a tener una estabilidad laboral, mejora en las remuneraciones, infraestructura y velar por la seguridad de los trabajadores e internos.
Dentro de sus demandas, la que menos ha sido considerada durante las conversaciones con autoridades, es aquella que exige las mejoras en el servicio para absorber la implementación de la Ley de Responsabilidad Penal Adolescente. Así también lo ha manifestado la dirigenta nacional.
Cortés no se mostró sorprendido por la situación, señalando que es normal que en nuestro país las cosas funcionen sobre la marcha, en un contexto improvisado y considera abiertamente que las cosas no deben funcionar así y que por ello han llegado a estas instancias.
Su mayor demanda es la seguridad y ante eso su preocupación es la manera en que se está trabajando en el hotel que se transformará en el centro de acogida para los jóvenes, lugar que no cuenta con las condiciones adecuadas para lo que la ley estipula, considerando que quedan solo 2 días.
La manifestación tiene dos alternativas. Primero que llegue el 8 de junio y que el movimiento nacional continúe o que simplemente durante el transcurso del día las movilizaciones acaben.
Lo único que por ahora tiene claro Cortés y sus compañeros, es que los técnicos que están detrás de la aplicación de la ley no saben cual es la realidad de sus demandas. “nosotros mejor que nadie, después de 9 años trabajando en esto, conocemos las características de los jóvenes que llegan a este lugar y reclamamos con fundamentos".
El dirigente se refirió además a las críticas que ha recibido el movimiento en cuanto a su tardía manifestación. “Nosotros siempre hemos manifestado nuestras demandas y advertido sobre los problemas, pero se ha hecho caso omiso a éstas. Es mentira eso de que no nunca hablamos, puesto que nosotros somos los actores principales de esta obra y sabemos que cosas podrían ocurrir, somos los especialistas, no somos esa gente que se fuma un puro y se toma un cafecito tiradito hacia atrás” señaló Eduardo Cortés.
En cualquier instante algo podría ocurrir en este emblemático caso, que tiene a cientos de trabajadores, funcionarios y a nuestros lectores, intrigados por la resolución.