Con desesperación llegó hasta el CESFAM de San Juan, Hararina Gonzalez. Su madre, una adulto mayor de 90 años y que se encuentra postrada, estaba mal debido a una bronquitis obstructiva.

Como miles de chilenos que no tienen acceso a otra atención de salud que no sea pública, ya había acudido anteriormente al recinto, donde le dijeron que pacientes postrados solo tenían derecho a visita de médico 2 veces al año.

Pero como su madre seguía peor, y sin poder hacer nada más, llamó nuevamente al CESFAM el día 18 de mayo, donde le dijeron que la ambulancia la visitaría a las 5 de la tarde en su casa, lo cual no ocurrió.

Esta vez concurrió derechamente al SAPU de San Juan a implorar por ayuda para su madre, pero en el local le avisaron que eso era imposible en ese momento ya que la ambulancia andaba "en un procedimiento muy delicado", por lo cual no podrían concurrir a su casa.

De vuelta a su hogar, se encontró de frente con la ambulancia del CESFAM de San Juan, estacionada en un local de completos y pizzas, y con los tres funcionarios, con uniforme de trabajo en el mismo local comprando (como se aprecia en las fotos que ilustran esta nota). La denunciante fue a hacerles ver esta situación, a lo que uno de los funcionarios le habría respondido de mala manera, diciendole "haga lo que quiera".

Investigación en curso

El Observatodo se comunicó con el departamento de salud municipal de Coquimbo, que señalaron estar al tanto de la situación, y que ya se abrió una investigación por lo sucedido. Así lo confirmó Mónica Álvarez, jefa del departamento. "Se inició un proceso de investigación para ver que fue lo que sucedió" agregando el estar comprando completos en horario de trabajo y con la ambulancia usada para una ruta que no corresponde a un procedimiento "no corresponde, por lo que se hace la denuncia de este tipo, y nosotros haremos la investigación correspondiente para ver porque estas personas estaban en ese lugar y la ambulancia no estaba en el centro de salud".

Álvarez además confirmó que durante la jornada de este viernes concurrirá un médico a ver a la adulto mayor, pese a que esto significa quitar a un profesional del Cesfam por algunas horas, teniendo en cuenta además el paro de salud que mantienen los trabajadores de los hospitales. 

Tras la denuncia, ahora Haranina teme posibles represalias, ya que el director del Cesfam le habría dado a entender que si seguía con ello, ya no se iba a atender a su madre. Además teme que el mismo paramédico que la increpó sea enviado a atender a su mamá. Sin embargo Álvarez señaló que estarán muy pendientes de este caso, para darle tranquilidad, tanto a ella, a su madre y a su familia.